Dacia Logan: más detalles de la nueva generación, menos low cost pero igual de racional

Hace algunas semanas atrás, Dacia develó las primeras imágenes de la nueva generación de su exitoso trío del segmento B: Sandero, Stepway y Logan. Pero como dicha presentación estaba enfocada en el mercado europeo, el sedán estaba casi “tapado” por el hatch y el crossover, que se robaron el protagonismo. Esto tiene una explicación: el tricuerpo se comercializará sólo en algunos países, no en todo el Viejo Continente dada la mayor preferencia por la silueta de cinco puertas. Ahora, la marca rumana brindó más detalles de cada uno y en nuestra región, el Logan sí tiene una gran demanda, por lo que vale la pena conocerlo un poco mejor.

En esta segunda generación –que algunos podrían interpretar como la tercera, aunque en realidad el que se comercializa actualmente es un profundo restyling del modelo original, manteniendo la plataforma B0- el cambio es total, desde su arquitectura, tecnología y por supuesto su diseño, nada queda del Logan que conocemos. Por empezar, el mayor salto lo da en su arquitectura, que lleva a la gran evolución en todos los demás aspectos: está desarrollado sobre la plataforma CMF-B de la alianza Renault-Nissan-Mitsubishi, compartida por ejemplo, con el nuevo Clio. Estéticamente se nota claramente que Dacia buscó alejarse de la imagen low cost de su antecesor, con líneas muchísimo más modernas y estilizadas, dejando de lado las formas más cuadradas y las superficies limpias sin mucho detalle. Por dar un ejemplo regional, el avance es tan notable como el que se dio en el Chevrolet Onix, que sin dudas será su rival más directo cuando arribe al Mercosur.

En el sector frontal, si bien aún tiene un aire al modelo actual, se destacan los nuevos faros con una firma luminosa en forma de Y que será la nueva seña de identidad de Dacia, un replanteo bastante profundo del paragolpes, que en el caso del sedán, son más sobrios y pequeños que en el Sandero. La gran diferencia aparece de perfil: el pilar A y por lo tanto la inclinación del parabrisas es más pronunciada –lo que mejora su aerodinámica-, junto con los anchos hombros a la altura del pasarruedas trasero y la línea de cintura que asciende de manera más abrupta en las ventanillas traseras. En este sector, el tricuerpo toma distancia del actual con un aplique plástico de color negro que se extiende en buena parte del pilar C y lo hace ver más estilizado. El remate posterior sí mantiene el baúl elevado, pero con faros más pequeños y también con un diseño interno en forma de Y, un recurso que estamos viendo en varios vehículos de diferentes marcas. No encontramos precisiones sobre las medidas del nuevo Logan, pero estimamos que será más largo y ancho, con una mayor distancia entre ejes, pero con una menor altura.

Puertas adentro, la única similitud que se puede señalar con respecto a la versión que se fabrica en la planta de Santa Isabel es el volante, que en el caso de Dacia es de cuatro rayos, el resto es completamente diferente. La idea de alejarse de su origen low cost se nota, con un diseño más elaborado y tridimensional y jugar con los materiales y texturas de los revestimientos, con apliques de tela en los paneles de las puertas y la parte central del torpedo. Las salidas de aire tienen un formato completamente distinto a sus antecesores y el estilo en general se destaca por los trazos rectos. Todos los comandos son nuevos y el instrumental tiene nuevos cuadrantes, pero conservando el mix analógico/digital.

Lo más acertado y racional de los nuevos Logan, Sandero y Stepway es el sistema multimedia: en Europa se ofrecerán tres alternativas. Las versiones más accesibles solo contarán con un simple puerto para fijar un smartphone y utilizarlo como un sistema de infoentretenimiento bajando una app, mientras que las intermedias sí disponen de una pantalla, pero sin un software especial o navegador, sólo conectividad a través de Android Auto o Apple CarPlay. ¿Cuál es la ventaja? Que no necesita actualizarse, por lo que no quedará obsoleto con el paso de los años, como sí pasa con muchas centrales multimedias. La tercera opción para las versiones tope de gama –o adquiriéndolo como opcional- sí será un sistema multimedia convencional compuesto por una pantalla táctil de 8” de formato tipo tablet flotante, por supuesto compatible con Android Auto/Apple CarPlay, y que incluye un soporte para el celular.

Mención aparte para la seguridad: al utilizar una plataforma más moderna y tecnológica, el Logan podrá equipar hasta 6 airbags, control de estabilidad, frenado autónomo de emergencia, cámara de retroceso y detector de punto ciego.

Mecánicamente, al igual que en los nuevos Sandero y Stepway, la oferta gira en torno a los nuevos motores nafteros 0.9 y 1.0 de tres cilindros: las más accesibles utilizarán el 1.0 SCe (aspirado) de 65 CV con caja manual de 5 marchas. Las más caras contarán con el 0.9 TCe (de 900 cc con turbo) de 90 CV, disponible con caja manual de 5 marchas o automática CVT y también habrá una opción 1.0 TCe de 100 CV bi-fuel que puede utilizar tanto nafta como GLP (gas licuado). Más adelante se sumarán variantes mild-hybrid o híbridas.

Renault aún no se pronunció sobre su llegada a nuestra región, pero se estima que arribarán hacia 2022, fabricados en Brasil, donde el grupo franco-japonés radicará la arquitectura CMF-B. La versión regional podría contar algunas diferencias en diseño para adaptarlo al estilo de la marca del rombo, pero esperemos que mantenga la misma dotación en seguridad y tecnología que su par rumano.