Kicks, su traducción literal sería “patadas” en inglés y bien podría significar la estrategia de Nissan para con su nuevo SUV, que viene a patear el tablero entre los Sport Utility del segmento B en base a una interesante propuesta conformada por su estética distintiva y un amplio abanico de tecnologías pensadas sobre todo para la conducción y seguridad.
Desde hace ya un par de años los SUV se convirtieron en una parte esencial de la gama de las automotrices, relegando a los monovolúmenes y sedanes en cuanto a preferencia del público, y la marca japonesa -que siempre se destacó por su experiencia en pick ups y todoterrenos-, no contaba con un jugador para esta categoría, que parece no tener techo ya que siguen –y seguirán- sumándose más competidores. Hasta que finalmente decidió encarar el desarrollo del Kicks, derivado la plataforma del March/Versa/Note y cuyo anticipo pudo verse en forma de concept en el Salón de Sao Paulo de 2014.
Pasada su etapa de desarrollo y luego de su presentación local en el Salón de Buenos Aires, el Kicks arribó a nuestro país en tres versiones y dos niveles de equipamiento, todas impulsadas por el motor naftero 1.6 de 120 CV con dos opciones de transmisión.
En estos primeros meses, llega importado de México pero pronto lo hará desde Brasil en la nueva planta de Resende (Río de Janeiro) que ya trabaja a un ritmo intenso para satisfacer la demanda y expansión de los mercados de exportación.
Tal como lo anticipamos hace algunas semanas atrás (ver nota), en lugar de evento de prensa multitudinario, Nissan Argentina prefirió realizar un almuerzo junto con sus directivos para luego entregarnos las llaves de su flamante producto para ponerlo a prueba y este es nuestro análisis:
Diseño Exterior:
¿Cómo destacarse en un segmento en el que hay cada vez más opciones y parece que ya todo está inventado? Con diseño, y la firma nipona suele caracterizarse por algunas propuestas bastante arriesgadas y originales.
El Kicks es motivo de orgullo para el centro Nissan Design America, con sedes en San Diego (Estados Unidos) y Rio de Janeiro (Brasil), ya que fue desarrollado íntegramente en la región, siempre bajo la atenta mirada de la casa matriz en Japón. Durante el Salón de Buenos Aires, el vicepresidente senior de diseño global de Nissan/Infiniti/Datsun, Alfonso Albaisa, justamente hizo referencia a su origen, explicando que el estilo de este SUV está inspirado en la cultura y vitalidad de los clientes latinoamericanos.
Su figura, marcada por líneas tensas, transmite dinamismo y deportividad. Posee 4.299 mm de largo, 1.760 mm de ancho (1.961 mm con espejos), 1.590 mm de alto y 2.620 mm de distancia entre ejes, con un buen coeficiente aerodinámico de CX 0,34.
En la parte delantera se destaca la prominente parrilla en forma de V –V Motion como la denomina la firma nipona- junto con los grandes faros que poseen lámparas halógenas para las luces principales, una firma Led y luces antiniebla con función de iluminación diurna, ubicadas en el sector inferior del paragolpes. El capot, que continúa las líneas de la parrilla con dos nervaduras que se extienden hacia el parabrisas le da un aspecto robusto al conjunto.
En los laterales cobran protagonismo sus líneas musculosas, con abultados pasarruedas, enmarcados por un plástico negro que subrayan su condición de crossover, y dan lugar a unas llantas de aleación diamantadas de 17 pulgadas (de serie en toda la gama), calzadas con neumáticos Continental ContiPowerContact en medida 205/55 R17. También llama la atención la línea de cintura que dibuja una suerte de tilde hacia el final de la puerta trasera y llega hasta la luneta con un aplique en color negro brillante, que simula continuar con la superficie vidriada. Una solución estética que también encontramos en el SUV más grande que Nissan comercializa en nuestro país, el Murano.
En la parte trasera resaltan los faros en forma de boomerang, que son muy vistosos y le dan un gran remate a este sector, pero que al sobresalir de la carrocería quedan bastante expuestos a golpes y toques de estacionamiento. El paragolpes sí posee una gran defensa en plástico negro, donde están insertos los sensores de estacionamiento.
En síntesis, un diseño atractivo, moderno y muy original, que demuestra que se puede ser diferente sin recurrir a extravagancias. En la calle recibió muchas miradas de aprobación y elogios, a pesar de que la unidad que manejamos era de color azul, bastante más discreto que la llamativa tonalidad naranja que también se ofrece en la paleta de colores del modelo.
Diseño Interior:
Puertas adentro nos recibe un habitáculo que desde la primera vista promete una muy buena calidad de materiales –impresión que terminamos comprobando al observarlo más en detalle-. El tablero combina trazos rectos con otros más redondeados, como las salidas de aire circulares de los extremos. Si bien está construido en su mayoría con plásticos duros, cuenta con numerosos apliques revestidos en cuero que realzan su aspecto y son agradables al tacto. Allí radica otro punto diferencial del Kicks, estos apliques varían contrastando con el color de la carrocería: pueden ser de color beige (como en el caso de nuestra unidad), naranja, negro o gris (en el caso de las versiones Advance), lo que le aporta un toque muy personal y corta con la sobriedad habitual. La decoración interior se completa con insertos tipo piano Black y otros símil aluminio.
El volante, forrado en cuero y regulable tanto en altura como en profundidad, está inspirado en el del deportivo GT-R –por cierto, una lástima que no se comercialice en nuestro mercado- y será el que utilicen los nuevos modelos de la marca, como el recientemente presentado Leaf o el Qashqai europeo. Cuenta con un buen grip y comandos para manos libres, el sistema multimedia y el display del instrumental, dos ítems de los cuales hablaremos más adelante. El único detalle que nos llamó la atención es la tapa en el brazo derecho del volante, como si en otras versiones incluyera allí otras teclas ¿para el control de velocidad crucero, quizás?
Volviendo a la consola central, se destaca la pantalla táctil de 7 pulgadas del sistema multimedia, que sobresale unos centímetros de la plancha. Para acceder a las funciones principales, también posee botones. En el sector inferior se ubica el climatizador automático, de eficaz funcionamiento, aunque sólo es de una zona y no ofrece salidas de aire atrás. Por debajo encontramos fichas USB/Aux y un tomacorriente de 12 Volts.
A continuación de la consola, hay un hueco portaobjetos como para dejar la “llave”, que únicamente posee los comandos para la alarma y apertura de puertas, ya que el arranque se realiza por botón en esta versión. Justamente, el interruptor de arranque se ubica por delante de la selectora, que además de las posiciones P, N, R y D, ofrece una opción Low –que no pasa de la 1ra marcha- y una Sport, aunque no dispone de mandos secuenciales ni levas.
La habitabilidad es una de las principales virtudes del Kicks, tanto adelante como atrás ofrece un amplio espacio para sus ocupantes. Las butacas delanteras, que la marca denomina Zero Gravity, están tapizadas en cuero y fueron desarrolladas junto con la NASA. Son muy cómodas y permiten realizar largos viajes sin cansarse. Pueden regularse en altura, de manera longitudinal y la inclinación del respaldo.
En las plazas traseras sobra espacio para las piernas y las rodillas, así como también a lo alto, permitiendo alojar cómodamente a dos pasajeros. Un eventual quinto ocupante irá algo más apretado, por lo angosto del respaldo en ese lugar y el falso túnel de trasmisión. Los respaldos de esta fila se pueden rebatir fácilmente en proporción 60/40.
Mención aparte para el baúl, que con 432 litros de capacidad, es uno de los más grandes del segmento. Además, debajo de la bandeja inferior encontramos una agradable sorpresa: la rueda de auxilio es homogénea, es decir, de la misma medida que las titulares y con llanta de aleación: excelente.
Instrumental:
Aquí hay que hacer una salvedad: para las versiones Advance, el Kicks cuenta con un instrumental convencional, conformado por dos esferas para el velocímetro y tacómetro –ambos analógicos-, más un display central para la computadora de a bordo. En el caso de la Exclusive, el SUV de Nissan dispone del Advance Drive Assist Display, un cuadro de instrumentos que combina un reloj analógico para el velocímetro, con una pantalla a color de 7 pulgadas, configurable a gusto del conductor con 12 funciones distintas, que abarcan desde el tacómetro, información sobre el consumo, autonomía, emisora sintonizada de la radio o canción que se está reproduciendo en el equipo de audio, hasta una brújula. Es muy útil, ofrece una buena visualización y es sencillo de operar.
En nuestras pruebas, el velocímetro registró un error del 2,7%, medido en cuatro oportunidades distintas: a 80 km/h del instrumento, la velocidad real era de 78 km/h; a 100, 98 km/h reales; a 120 km/h de aguja, fueron verdaderos 116 km/h; y a 130 eran 126 km/h reales.
Equipamiento:
Analizando el listado de confort, si bien es completo con climatizador automático, volante multifunción, tapizado de cuero, levantavidrios y espejos eléctricos, cierre centralizado con comando a distancia, apoyacabezas regulables en altura, posavasos delanteros y encendido automático de luces, hilando un poco fino encontramos algunos faltantes, como salidas de aire traseras, techo solar, bloqueo de puertas en movimiento, sensor de lluvia, one touch en todas las ventanillas (sólo lo tiene la del conductor) y especialmente el control de velocidad crucero, que siempre viene bien en viajes largos y con tránsito fluido.
Párrafo aparte para el sistema multimedia, que en el nivel Exclusive cuenta con una pantalla táctil de 7”, con radio AM/FM/MP3, fichas USB/AUX/iPod ready y 6 parlantes, además de un práctico sistema que simula una visión de 360° (Intelligent Around View monitor), con 4 cámaras perimetrales –incluida la de retroceso- y sensores de estacionamiento. Cabe señalar una particularidad: en el nivel Advance este sistema ofrece compatibilidad con Android Auto/Apple CarPlay, característica que no está disponible en el Exclusive que sí cuenta con navegador integrado, un detalle un tanto extraño pero que en lo personal no me parece demasiado grave (prefiero contar con un GPS ya instalado en el software del auto a depender de la señal y el plan de datos del celular), ya que al contar con Bluetooth igualmente se puede tener acceso a la música, contactos o llamadas del Smartphone, aunque sí hay que mencionarlo para quienes valoran la conectividad.
Seguridad:
En este aspecto, la dotación de esta versión Exclusive es muy completa, con cuatro airbags (frontales, laterales y de cortina), cinturones inerciales y apoyacabezas en las cinco plazas, control de estabilidad –que Nissan denomina VDC-, frenos a disco delanteros y traseros a tambor, ABS, distribución electrónica de frenado (EBD) y asistencia al frenado de emergencia (BA). Adicionalmente, agrega el Intelligent Trace Control (Control Inteligente de Trazo, que activa automáticamente los frenos internos o externos al doblar en una curva pronunciada), Intelligent Ride Control (Control Inteligente de Manejo: en caso de un golpe imprevisto, como un pozo o desnivel, el vehículo frena de manera rápida para amortiguar el impacto) e Intelligent Engine Brake (Freno Inteligente de Motor, disminuye la velocidad del vehículo reduciendo las marchas, ayudando a no sobrecargar los frenos.
En las variantes intermedias, acertadamente mantiene el VDC y los demás sistemas (a excepción del IEB, disponible sólo en las versiones automáticas) pero resigna cuatro bolsas de aire, quedándose sólo con las frontales. Los anclajes Isofix son de serie para toda la gama. Muy buen equipamiento teniendo en cuenta a sus competidores del segmento, algunos de los cuales ofrecen una dotación similar y otros en cambio ni siquiera cuentan con anclajes para sillas infantiles.
Motor, transmisión y comportamiento:
El Kicks llega con una única motorización -naftera-, que la marca denomina internamente HR16DE, de 1.598 cm3, 16 válvulas, doble árbol de levas a la cabeza (DOHC) comandado por cadena y sistema de admisión variable. Desarrolla 120 CV a 6.300 rpm y 149 Nm de torque a 4.000 rpm.
Sólo la versión Advance ofrece una caja manual de 5 marchas, mientras que el resto de la gama -especialmente la Exclusive que probamos- cuenta con una transmisión automática CVT (de variador continuo), que posee el sistema D-Step, que simula el paso de marchas para evitar la típica sensación de las CVT de que el motor aumenta el régimen casi hasta el corte de inyección, mientras que el vehículo incrementa su velocidad mucho más lentamente. Por el momento se ofrece únicamente con tracción delantera, de hecho, en ninguno de los mercados donde también se comercializa existe una variante con tracción integral.
Si bien la potencia puede parecer bastante modesta, sobre todo si se tiene en cuenta que algunos de sus rivales tienen versiones con hasta 170 y 187 CV, el bajo peso del Kicks (1.140 kg) le permite moverse con soltura en cualquier ámbito. Sólo en algunas ocasiones, como un sobrepaso, hay que exigir un poco más al motor para obtener la reacción necesaria. En nuestras pruebas, aceleró de 0 a 100 en 11,38 segundos y alcanzó una velocidad máxima de 174 km/h. En cuanto a elasticidad, tardó 8,82 segundos en pasar de 80 a 120 km/h. Cifras que no sorprenden por su gran performance pero que tampoco están para nada mal. Como aclaración o dato adicional, la caja posee un modo Sport, que a diferencia de otros autos en los que al utilizarlo sólo se estira el cambio de marchas a más altas rpm sin evidenciar una mejora notable, en el Kicks sí le aporta mayor reacción, como si el motor entregara algunos Nm más de par. La explicación la encontramos en que el impulsor desarrolla su máximo torque a las 4.000 rpm, régimen al que se llega activando esta función con el botón ubicado al costado de la selectora.
En este caso, la combinación entre la dosis justa de potencia y un peso contenido sí se traduce en eficiencia: según nuestras mediciones, a 130 km/h (2.700 rpm) el consumo fue de 8,6 l/100km, a 120 km/h (2.300 rpm) se redujo a 7,0 l/km y en el ámbito urbano 10,2 l/100km. El único punto que se le puede reprochar en este aspecto es su autonomía, debido a un tanque de combustible de apenas 41 litros, que hace que por más eficiente que sea el conjunto motriz, nos obligará a parar a repostar cada 742 km si vamos a un ritmo muy tranquilo de 100 km/h.
Justamente, si pensamos realizar un viaje largo –o también en el uso diario- otro factor importante a valorar es la insonorización y en el Kicks está muy bien resuelta. En ralentí y hasta velocidades medias, el motor no se percibe en absoluto, recién se hace sentir en el habitáculo a alta velocidad o en aceleraciones repentinas hasta que el régimen de rpm se estabiliza. Se nota un buen trabajo de aislamiento acústico en todo el interior, también en su construcción, ya que no se sintieron ruidos de plásticos sueltos o mal encastrados al circular por terrenos desparejos.
La suspensión es del tipo McPherson adelante y con barra de torsión atrás. Su puesta a punto está claramente orientada al confort, lo que se agradece mucho en ciudad y en terrenos desparejos, aunque tampoco penaliza en ruta, donde ofrece una correcta tenida siempre y cuando no se la exija más de la cuenta. A pesar de su alto centro de gravedad, no evidencia un rolido demasiado marcado.
La dirección está asistida eléctricamente, lo que como siempre decimos, es una aliada en maniobras de estacionamiento, espacios reducidos y en ciudad. En ruta se va endureciendo al aumenta la velocidad por lo que siempre ofrece la firmeza justa.
Por último, resta analizar el frenado: según nuestras pruebas, el Kicks necesitó 41 metros para detenerse por completo de 100 km/h a 0, un valor normal teniendo en cuenta que cuenta con frenos a tambor en el eje trasero. Los sistemas de asistencia (ABS/EBD/BA) trabajaron correctamente y mantuvieron en todo momento la trayectoria del vehículo sin tener que hacer correcciones al volante.
Precios:
El Kicks Exclusive CVT que probamos cuesta actualmente $490.600 (con una garantía de 3 años o 100.000 kilómetros), un valor intermedio si lo comparamos con sus rivales: Citroen C4 Cactus S&S Shine AT6 ($471.000), Ford EcoSport Titanium 1.5 AT6 ($482.000), Peugeot 2008 1.6 Allure Plus Tiptronic ($416.200), Hyundai Creta Connect AT6 (U$S31.500 o $545.360, según cotización actual del dólar), Jeep Renegade 1.8 eTorQ AT6 ($522.900) y Honda HR-V EX-L CVT ($599.000).
En el balance final, se destaca por su diseño distintivo, gran habitabilidad, muy buen nivel de seguridad y calidad general -sumado a la buena reputación de Nissan en cuanto a confiabilidad y servicio-, junto con una mecánica eficiente. Queda en los puntos a mejorar los faltantes de equipamiento que señalamos y una autonomía justa, pero sin dudas se trata de un muy interesante producto que debe ser tenido en cuenta entre los que buscan un B-SUV y que creemos será uno de los pilares de la consolidación de la marca japonesa en nuestro mercado.
A continuación detallamos el cuadro con prestaciones y consumos:
| Valores obtenidos con nuestro equipo de medición de performance | ||
| Aceleración | ||
| 0 a 100 km/h | 11,38 seg | 189,86 m |
| 0 a 100 m | 7,56 seg | 78,48 km/h |
| 0 a 200 m | 11,64 seg | 101,36 km/h |
| 0 a 300 m | 15,04 seg | 117,02 km/h |
| 0 a 400 m | 18,13 seg | 121,71 km/h |
| 0 a 1000 m | 33,91 seg | 148,50 km/h |
| Consumo | |||
| Velocidad | Régimen motor | Consumo | Autonomía |
| a 100 km/h | 1.800 rpm | 5,6 l/100km | 742 km |
| a 120 km/h | 2.300 rpm | 7,0 l/100km | 582 km |
| a 130 km/h | 2.700 rpm | 8,6 l/100km | 475 km |
| Urbano | 10,2 l/100km | 401 km | |
| Recuperación de 80 km/h a 120 km/h |
|
| En Directa | 8,82 seg |
| Diseño atractivo | Faltantes de confort |
| Completo equipamiento de seguridad | Motor con prestaciones justas |
| Equilibrado comportamiento dinámico | Caja sin opción secuencial ni levas al volante |
| Buena calidad de materiales y ambientación interior | Autonomía |
| Destacada habitabilidad | |
| Rueda de auxilio homogenea y de aleación | |
| Características Nissan Kicks |
|
| Motor | Nafta 4 cilindros |
| Cilindrada en cm3 | 1.598 |
| Potencia CV/rpm | 120/6.300 |
| Par máximo kgm/rpm | 15,2/6.300 |
| Velocidad máxima km/h | 175 |
| Peso en kg | 1.140 |
| Capacidad tanque de combustible en litros | 41 |
| Capacidad de baúl litros | 470 |
| Neumáticos | 205/55 R17 |
| Consumo a 100 km/h | 5,6 l/100 km |
| Consumo a 130 km/h | 8,6 l/100 km |
| Consumo urbano | 10,2 l/100 km |
| Precio en pesos | $490.600 |
| Garantía | 3 años o 100.000 km |
Carisima. Y hay gente que compra cada cosa….
La línea Nissan me gusta mucho, en especial la Murano y la NP300 la cual la considero la mejor Pick-Up entre todas las marcas, peeero ni en dope me compraría esta cosa ya que te la pueden bautizar de SUV ó de lo que sea, pero es simplemente un autito mediano carrozado hasta atrás … Cordiales saludos.
esta muy bueno pero por su precio hay faltantes.. esperemos baje al fabricarse en brasil, cosa que no creo