El grupo brasileño CAOA, que distribuye vehículos Ford, Subaru y Hyundai en Brasil, adquirió el 50% de la operación brasileña del grupo chino Chery y planea invertir 2.000 millones de dólares en este negocio en los próximos cinco años.
La filial del grupo chino ahora se llamará CAOA-Chery y utilizará Brasil como base para toda Latinoamérica, conlas fábricas en Anapólis (Estado de Goiás), donde el grupo brasileño ensambla los vehículos de la marca Hyundai y en Jacareí (estado de São Paulo), donde se encuentra la fábrica de Chery.
El grupo CAOA (llamado así por su fundador, Carlos Alberto de Oliveira Andrade) aseguró que la asociación existente con Hyundai de Corea del Sur no se verá afectada por esta decisión sobre «una compra que permitirá la introducción de nuevas tecnologías, así como el desarrollo de nuevos productos«, según el actual presidente, Mauro Correia.
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El grupo brasileño agregó que lanzará nuevos modelos a partir del próximo año con el objetivo de que Chery pueda alcanzar en 2022 una participación del 5 % en el mercado de automóviles de Brasil, lo que lo ubicaría por encima de montadoras que tienen plantas más antiguas en Brasil como Jeep (3,87 %) y Nissan (2,89 %).
El grupo brasileño no reveló cuánto pagó para convertirse en accionista de Chery, y el acuerdo se hizo público el pasado día sábado. Chery produce en Brasil tres modelos: el nuevo QQ, el Celer Hatch y el Celer sedan (estos dos últimos llamados Fulwin en nuestro país)