El A4 es uno de los productos más vendidos de Audi a nivel mundial y es el más moderno entre sus dos competidores alemanes, el BMW Serie 3 y el Mercedes-Benz Clase C. Aún así, a dos años de su presentación mundial, la firma de Ingolstadt develó una leve actualización que abarca tanto al sedán como a la rural Avant.
Estos cambios son principalmente estéticos y se aprecian sobre todo en las versiones con el paquete deportivo S-Line y Black line edition, exclusiva de la variante familiar. Se retocó la parrilla Single Frame, que adoptó un aspecto 3D y detalles cromados, como en los últimos productos presentados por Audi. También se rediseñó por completo el paragolpes delantero, que luce un estilo más agresivo, incorporando un marco en forma de trapecio para las luces antiniebla, pintado de color aluminio, al igual que el spoiler frontal.
De perfil, las novedades se limitan a las llantas de aleación, disponibles en una variada gama de diseños y medidas, que van desde las 17 a 19 pulgadas.Por último, en la parte trasera se modificó el sector inferior del paragolpes, con salidas de escape dobles, de mayor tamaño.
A todo esto, la opción Black line edition agrega vidrios delanteros tintados, barras de techo y espejos retrovisores en color negro, paquete de ambientación interior Audi exclusive y llantas de aleación Audi Sport de 19 pulgadas con terminación en color titanio mate.
Mecánicamente y en lo que respecta a equipamiento no hay novedades, manteniendo intacta su gama de propulsores y versiones. Esta actualización llegará a los concesionarios europeos durante el tercer trimestre de este año y muy posiblemente arribará a nuestro mercado a principios de 2019.
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