La llegada de la división N representó un antes y un después para Hyundai, una muestra de que su enorme potencial de desarrollo se podía volcar también a los deportivos y su primer producto, el i30 N lo confirmó: el hatchback –que también se comercializa en formato liftback- se mide de igual a igual y nada tiene que envidiar a otros hot-hatch como el Volkswagen Golf GTI, Seat León Cupra o Renault Mégane R.S. Pero la marca coreana quiere ir por más y plantarse también a los Golf R y Focus RS, conocidos por, además de ofrecer una mayor potencia, contar con tracción integral.
Es por eso que, según trascendió, ya están desarrollando una variante del i30 N con tracción integral. La idea no es para nada descabellada e incluso resulta más sencilla de llevarla a la práctica: como se sabe, el i30 comparte plataforma con la Kona y el B-SUV ya cuenta con versiones con doble tracción –dos de las cuales se comercializan en nuestro mercado-, por lo que adaptar su eje trasero y sistema de tracción al i30 no va a presentar ninguna complicación.
Así lo confirmó Guido Shenken, encargado de comunicación de la marca para su filial australiana a la web local CarsGuide. El ejecutivo, además, destacó que el proyecto de un i30 N AWD siempre estuvo entre los planes de la automotriz.
Actualmente, la versión más deportiva del i30 –del que no está prevista su llegada a Argentina- cuenta con la misma configuración mecánica que el Veloster N –que sí se vende en el país-: el motor naftero 2.0 T-GDI (turbo, con inyección directa), que eroga 275 CV a 6.000 rpm y un torque de 353 Nm entre las 1.450 y 4.700 rpm –que puede elevarse a 378 Nm con la función overboost-, asociado a una caja manual de 6 marchas. La variante AWD podría ser incluso más potente para compensar su diferencia de peso y considerando que sus rivales superan los 300 CV.
Por el momento, más allá de la confirmación, no hay mayores precisiones sobre su fecha de presentación, aunque no debería demorarse demasiado por lo que mencionamos anteriormente.
