A poco más de una semana de haber anunciado sorpresivamente una propuesta de alianza y posterior fusión al Grupo Renault, el Grupo FCA finalmente desistió de este plan y retiró su oferta al consorcio francés. Así lo confirmó la propia compañía ítalo-americana en un comunicado de prensa.
Según esta publicación, el Consejo de Administración de Fiat Chrysler Automobiles se reunió el miércoles por la tarde bajo la presidencia de John Elkann y decidió retirar inmediatamente la propuesta al Grupo Renault.
El motivo de la cancelación tiene que ver con “condiciones políticas” desfavorables por parte del gobierno francés. Vale recordar que el Estado galo cuenta con una importante participación accionaria dentro del Grupo Renault, así como también en el Grupo PSA: “FCA sigue firmemente convencida de la estricta lógica evolutiva de una propuesta que recibió un amplio reconocimiento desde el momento en que se formuló y cuya estructura y condiciones fueron cuidadosamente equilibradas para asegurar beneficios sustanciales para todas las partes. Sin embargo, ha quedado claro que actualmente no hay en Francia condiciones políticas para que una fusión de este tipo pueda avanzar exitosamente”, detalla el comunicado.
Luego de esta reunión entre sus accionistas, el consorcio ítalo-americano definió continuar con su estrategia comercial y de producto de manera independiente, por lo que ya no habla de alianzas con otras compañías.
Vale recordar que el acuerdo –ahora trunco- con Renault preveía la creación de una nueva compañía, dividiendo las acciones en un 50% para el Grupo FCA y el 50% para Renault. Llamativamente, las compañías japonesas que forman parte de la alianza Renault-Nissan-Mitsubishi podrían quedar afuera –luego de no concretarse la fusión con Nissan- o reducidas a una mínima parte del directorio, que hubiese estado formado por cuatro miembros de FCA, cuatro de Renault y sólo uno de la firma nipona. Entre los principales beneficios destacados en aquel momento, se señalaba el posible regreso de Renault al mercado norteamericano, mientras que FCA podría acceder a otros mercados muy importantes como Rusia, Asia, África y Medio Oriente, así como a la tecnología de electrificación y plataformas EV desarrolladas por la marca francesa, con un ahorro de costos estimado en 5.000 millones de euros, al compartir todo el proceso de I+D.