Algunos recordarán que hasta hace unos años atrás Lifan contaba con una planta en Uruguay, pero que debido a la caída de la demanda en la región –especialmente en Brasil, principal mercado al que iba dirigida la producción y que en ese momento atravesaba una dura crisis económica- debió suspender sus actividades y a los más de 100 trabajadores que formaban parte del staff.
Ahora la marca anunció un acuerdo con su par china Brilliance y miembros del Gobierno para retomar la producción a partir de 2020, ensamblando vehículos para ambas automotrices. Nuevamente, el mayor volumen estará dirigido a Brasil –en franca recuperación-. Para ello, 80 de los 120 operarios serán reincorporados luego de que hace unas semanas atrás el Parlamento uruguayo aprobó una extensión del seguro de desempleo para los trabajadores de Lifan por seis meses más, con el objetivo de no perder la mano de obra calificada. Según informan medios de prensa del país vecino, esta alianza ya se venía negociando desde junio, cuando Kevin Liu, presidente de Lifan para Uruguay y Brasil declaró en una entrevista al diario El País que la compañía estaba “revisando” un posible convenio con otra empresa china para compartir la línea de ensamblaje.
De acuerdo a la firma asiática, la meta prevista es producir unas 10.000 unidades anuales, que podrían aumentar a 50.000 vehículos por año con la llegada de nuevas inversiones e inclusive existe la posibilidad de comenzar a ensamblar vehículos eléctricos.
El acuerdo fue celebrado por el Gobierno local como un avance en las relaciones entre ambos países: “Uruguay comenzó a transitar el camino del transporte automotriz eléctrico y allí podemos tener otro hito en las relaciones entre Uruguay y China”, destacó Lucía Topolansky, Vicepresidenta del país vecino.
Hasta el momento ninguna de las marcas aclaró qué vehículos serán fabricados en la planta de San José, pero vale recordar que en el caso de Lifan, ensamblaba allí el utilitario Foison y el B-SUV X60 –ahora discontinuado en Argentina-.