Los salones internacionales del automóvil ya no son lo que eran: más allá del asombroso e impresionante despliegue que cada automotriz prepara para su stand con la intención de captar la atención del público y de la prensa, cada vez son más las marcas que deciden no participar de estos eventos. Esto viene sucediendo en muestras tan tradicionales como el Salón de Frankfurt, París o Ginebra, pero también a nivel local y regional. El ejemplo más próximo y claro es el Salón de Sao Paulo, que se realizará en noviembre, pero que a pesar de las grandes expectativas iniciales en cuanto a novedades de producto, ahora es noticia por la cantidad de compañías que ya anunciaron que no estarán presentes: nada menos que 12, muchas de las cuales son de las más vendidas en Brasil y el resto de Sudamérica.
En ese sentido, una de las ausencias que más impactará es la de General Motors: hace unos días atrás, la firma estadounidense confirmó oficialmente que no participará de la muestra paulista, lo que sin dudas llamó la atención y fue portada de los principales medios de prensa del país vecino, dado que Chevrolet cuenta con uno de los productos más vendidos en Brasil, el Onix –con toda su gama de derivados- y también se esperaban más novedades sobre la plataforma GEM o el facelift de la S-10. La explicación de la terminal fue la siguiente: “Chevrolet no participará del Salón de Sao Paulo en 2020, nuestra estrategia de ventas y marketing está basada en la experiencia del cliente (…) Nuestra forma de relacionamiento con el consumidor viene siendo cada vez más digital, prueba de eso es que cerca del 32% de las ventas se inician de manera digital (….). Así, nuestra estrategia es enfocarnos cada vez menos en formatos analógicos y apostar más en plataformas digitales y personalizables, siempre teniendo en cuenta al cliente como centro de todo lo que hacemos”.
Otra de las ausencias significativas será Toyota y su división de lujo Lexus. El argumento fue bastante similar al de GM, ya que explicaron que ambas marcas se enfocarán en las experiencias particulares con sus clientes, tanto en el área de movilidad o electrificación, como en su división deportiva. Justamente, vale recordar que este año, Toyota Gazoo Racing debutará en el campeonato de Stock Car brasileño. En cuanto a productos, este año tampoco contaba con alguna novedad de peso, ya que el B-SUV regional, recién será develado en 2021.
La última en anunciar que no formará parte de la muestra fue Hyundai, una compañía de gran peso en Brasil con el éxito del HB20, que produce allí varios de sus vehículos y que en ediciones anteriores tuvo importantes novedades como el prototipo de la pick up basada en la Creta. Angel Martínez, Vicepresidente de la filial local de la firma coreana, explicó al respecto: “La estrategia global de Hyundai viene valorizando, desde el año pasado, eventos con formatos diferenciados con mayor foco en el ser humano, proporcionando un relacionamiento más exclusivo con sus clientes y el público. Evaluamos bastante la situación aquí en Brasil y decidimos sustituir la participación en el Salón del Automóvil por otras actividades más exclusivas a lo largo del año”.
Además de estas cuatro marcas, completan el listado de ausentes –por ahora-, Citroën, JAC Motors, Jaguar, Land Rover, BMW, MINI, Peugeot y Volvo. Aunque también está en duda la participación de Ford, que está analizando su decisión.
Tal como lo fueron comunicando las automotrices mencionadas anteriormente, uno de los principales motivos de esta debacle de los salones internacionales está relacionada con el interés del público y las nuevas tendencias y tecnología: son cada vez menos quienes quieren pagar una entrada y tomarse toda una jornada para recorrer los stands, en cambio, muchos prefieren mantenerse al tanto de las novedades por internet, sea en medios de prensa o las webs oficiales de cada marca que cada vez ofrecen más herramientas para conocer sus productos desde la comodidad del hogar. Es la misma tendencia impulsada por el e-commerce que está desplazando las tradicionales visitas a los concesionarios y showrooms por las nuevas plataformas digitales.
La otra razón también suena lógica: en vez de realizar una costosa inversión en el armado del stand, el traslado de los vehículos y todo el personal que trabaja en el salón, las marcas prefieren realizar eventos particulares presentando sus novedades específicas. Así, no sólo se aseguran tener una llegada directa con los clientes o la prensa, sino que también evitan compartir el protagonismo con sus competidores como sí sucede en una muestra.
Por último, el tercer motivo está relacionado con lo anterior: los costos. Como ya se sabe, esa fue la causa principal –junto con la notable caída en las ventas- de la cancelación del Salón de Buenos Aires y que también sucede con otros eventos internacionales de este tipo. Alquilar un espacio, armar un stand y toda la logística relacionada con ello y todo el despliegue de personal para las presentaciones o el funcionamiento del stand como técnicos, bailarines, promotoras, asesores comerciales, etc., representa un enorme gasto que no llega a justificarse o a cubrirse y las automotrices llevan un control cada vez más exhaustivo de los costos.
No les queda nadie, van a hecer una exposición con la aberrante Fiat Elba de 2 puertas, el Puma, el Santa Matilde y el Brasinca, y pueden poner fotos de todo lo que convirtieron en Cross agregándoles puros plásticos.
Las terminales no son tontas y saben muuuuy bien de números … Los costos-beneficios por exponer son muy negativos, bien simple …
El próximo año que el Salón de SP baje radicalmente los «alquileres» y tema solucionado …
Espero que en BsAs en la Rural hayan «tomado nota» y que no se zarpen, ya hubo varios «ausentes sin aviso» en varias exposiciones, algunas fueron algo pobres, tema que obviamente fue bastante disimulado por los medios de prensa, no es normal que no participen algunas marcas generalistas.