¿Supera la barrera de los 200 CV?: la Toyota Hilux podría elevar la potencia del motor 2.8 hasta los 204 CV

En el segmento de las pick ups medianas hay una suerte de barrera en torno a la potencia: si hasta hace unos diez años atrás, 140 CV era considerada una muy buena cifra, hoy la referencia está en los 200 CV. La primera en alcanzarla fue la Ranger con el motor Puma 3.2 TDCi, al tiempo la siguió Chevrolet con el Duramax 2.8 de idéntica potencia en toda la gama y luego la Amarok la superó con su V6 3.0 TDI de 224 CV (ahora 258 CV). La Toyota Hilux siempre se mantuvo al margen y eso pareció no hacer mella en sus ventas, ya que desde hace más de una década se mantiene firme como líder. Pero ahora, la propia marca japonesa decidió ponerse a tono y tomar cartas en el asunto de cara a la nueva actualización de su producto estrella: se rumorea que la Hilux llegará a 204 CV.

Tal como lo vinimos anticipando en varios artículos anteriores, Toyota está realizando las últimas pruebas de puesta a punto de la que estimamos será la última actualización de la generación actual de la Hilux y una de sus claves estará en la motorización: el conocido y fiable propulsor 1GD de 2.8 litros, que también será utilizado en la Land Cruiser 300, recibirá un ajuste en su electrónica que permitirá aumentar su potencia pasando de los actuales 177 CV a los mencionados 204 CV, mientras que el torque se incrementará en 2 kgm, llegando a los 47,9 kgm, superando levemente a la Ranger. Así lo anticipó la web CarsGuide haciendo referencia al todoterreno insignia de la firma nipona que, como se sabe, comparte varios componentes con la pick up y la SW4.

Además de esta novedad en su mecánica, la Hilux recibiría un rediseño algo más profundo que en su actual facelift, con nuevos faros, parrilla y paragolpes. También estrenaría un nuevo diseño para las llantas de aleación y mínimas modificaciones en el remate posterior.

Puertas adentro, si bien hasta el momento no se filtró ninguna fotografía, la Hilux/SW4 incorporaría un nuevo sistema multimedia, con una pantalla táctil con mejor definición y una interfaz más rápida –detalle siempre criticado en la actual- y que, a pedido de los clientes que reclamaban este ítem, será compatible con Android Auto y Apple CarPlay.

Adicionalmente, aunque en algunos países como Australia la pick up y el SUV ya los equipan, ambos incorporarán el paquete de asistentes de conducción Toyota Safety Sense, compuesto por el control de velocidad crucero adaptativo, frenado automático de emergencia, alerta de cambio de carril involuntario y asistente de luces automático.

La presentación de esta actualización estaría prevista para junio de este año en Tailandia, aunque posiblemente la pandemia de coronavirus pueda alterar el cronograma ya que además del cierre temporal de las plantas de Toyota, también sus proveedores se encuentran en la misma situación. Luego de su debut en el país asiático sí arribará a nuestra región, producida como siempre en la planta bonaerense de Zárate.