El Mégane seguirá formando parte de la gama de Renault a futuro, eso ya fue confirmado por la propia marca hace algunas semanas atrás cuando surgieron rumores sobre su posible discontinuación. Sin embargo, la firma del rombo y su diseñador, Laurens van den Acker dejaron entrever que sus productos deberán adaptarse a los tiempos que corren y en la actualidad si hay un segmento en auge ese es sin dudas el de los SUV’s, lo que hace pensar que el hatchback en su próxima generación pueda incorporar una variante en formato de crossover, algo que ya están haciendo algunos de sus rivales.
El hatchback sigue siendo uno de sus productos más exitosos y claves para la marca, pero mientras que las ventas del segmento C van cayendo, las de los SUV’s no paran de crecer y como ya se ha visto, parece que siempre queda espacio para uno más: Renault ya cuenta con el Kadjar y el Captur, pero entre medio de ellos podría situarse un crossover, un Mégane aventurero y es lo que están estudiando cuidadosamente desde la compañía. La idea no es descabellada: Ford cuenta con el Focus Activ, Kia con el Xceed, Toyota hace poco confirmó al Corolla Cross… entonces, un Mégane Cross suena lógico.
La fórmula es la misma de siempre: mayor despeje, pasarruedas y protecciones en color negro y barras de techo. La plataforma y motorizaciones serían idénticas a las versiones convencionales, lo que representa un importante ahorro de costos.
Por el momento, la cuarta generación del mediano está en plena vigencia y recientemente fue presentada una actualización, pero su sucesor ya tiene fecha: será revelado en 2023 y sobre esta posible variante crossover, nuestros colegas españoles de Motor.es ya realizaron una proyección que anticipa cómo puede ser su aspecto. Manteniendo algunos trazos del hatchback actual, especialmente en los laterales, las novedades se destacan principalmente en el sector frontal, inspirado en el Concept Morphoz, mientras que su carrocería evidencia la transformación hacia un SUV o crossover por el mayor despeje y las protecciones antes mencionadas.
Lo que sí se sabe del Mégane V es que estará basado en la plataforma CMF, pero con una nueva arquitectura electrónica orientada a la introducción de nuevos sistemas de asistencia a la conducción –de tipo semi-autónoma-, así como para la electrificación de sus mecánicas, que será una de las claves de la próxima generación conocida internamente como Proyecto BFN. Además, contará sólo con motores nafteros, tanto híbridos o mild-hybrid como híbridos enchufables e inclusive podría sumar una versión 100% eléctrica.
Fotografia: Autobild
Me da la impresión que intentaron «imitar» la facia del Golf. Pero esperemos que sea un excelente producto, confiable como todo buen Renault (y Dacia)!
Saludos y buena noticia, aunque el segmento ya esta cargado de suvs.