Pirelli concluyó su análisis sobre una serie de neumáticos que corrieron en el Grand Prix Británico el pasado fin de semana. Esto permitió identificar la causa de las fallas que afectaron tanto a Mercedes como al McLaren de Carlos Sainz.
La razón clave se debe a un conjunto de circunstancias individuales de la carrera que llevaron a un uso extremadamente largo del segundo conjunto de neumáticos. Casi todos los equipos anticiparon su parada en boxes y entonces desarrollaron sprint final de aproximadamente 40 vueltas, que es más de tres cuartos del total del largo de la carrera en una de las pistas más exigentes del calendario.
A esto se le combinó el ritmo notablemente mayor de los autos de Fórmula 1 (la pole position fue 1.2 segundos más rápido comparada con 2019) esto hizo que las últimas vueltas del Grand Prix Británico fueran especialmente difíciles, como consecuencia de las exigencias a los que fueron sometidos los neumáticos.
Esto llevó a que el neumático delantero izquierdo (que es conocido por trabajar más exigido en Silverstone) se sometiera a una tensión máxima después de un número muy alto de vueltas, con el alto desgaste resultante.
Para la segunda carrera en Silverstone este fin de semana, Pirelli confirma los compuestos nominados: C2, C3 y C4, siendo un paso más suave que los vistos en el último GP.
También se revisará la prescripción de uso, aumentando las presiones mínimas de los neumáticos para reducir el estrés.