
Hace 45 años atrás, más precisamente en julio de 1975 vio la luz el que se convertiría en el modelo más exitoso y representativo de BMW, el Serie 3, modelo que siempre se destacó por combinar la elegancia y sobriedad de una berlina con el toque deportivo y el dinamismo propio de la firma de Munich.
Aquella primera generación -conocida internamente como E21- se mantuvo en el mercado hasta 1983 y su diseño fue obra de Paul Bracq, afamado diseñador de la marca quien también creó otro ícono como el M1. Estéticamente, tal como hasta ahora, el Serie 3 estaba inspirado en el Serie 5 de la época, marcando un importante punto de quiebre respecto a los modelos clásicos de BMW de la década del 60, con detalles que se mantienen hasta el día de hoy. Inicialmente, se ofreció sólo con carrocería de dos puertas y eficientes motores de cuatro cilindros, capaces de funcionar con nafta regular -más barata que la súper, algo muy valorado durante la crisis del petróleo-. Estos propulsores estaban basados en el M10 con el que Nelson Piquet obtuvo el campeonato de Fórmula 1 en 1983 y la gama estaba compuesta por tres versiones: 316, con 90 CV; 318, con 98 CV; y 320, con 109 CV, en todos los casos alimentados por carburadores Solex. Como tope de gama se añadió después el 320i, con un sistema de inyección que elevaba la potencia hasta los 125 CV.
A nivel de diseño, la forma de diferenciar sobre todo a las variantes más equipadas era por su sector frontal: el 316 y 318 contaban con faros delanteros simples, mientras que el 320 y 320i disponían de faros dobles, una característica que sigue siendo una seña de identidad de los BMW actuales. Puertas adentro, el Serie 3 fue el primero en tener la consola central orientada hacia el conductor, siendo este otro rasgo que se mantiene en la actualidad junto con la iluminación del tablero en color naranja.
Otro punto de inflexión en su historia se dio en el Salón de Frankfurt de 1977, cuando debutaron los motores de seis cilindros en las versiones 320/6 y 323i, una configuración que la marca sigue reservando para las variantes tope de gama o deportivas. En el caso del 320/6, utilizaba un 2.0 alimentado por carburador, mientras que el 323i equipaba un 2.3 litros a inyección de 143 CV. Un año después también hubo novedades para el 316, que adoptó un nuevo propulsor 1.8 de 90 CV y el 318i, que como su nombre lo indica, sumó el sistema de inyección que incrementó su potencia hasta los 105 CV. Finalmente, esta primera generación tuvo sus últimas novedades importantes en 1981, cuando se incorporó el 315 con un motor 1.6 de 75 CV como opción de entrada de gama y en mayo de ese mismo año, cuando el Serie 3 alcanzó el millón de unidades producidas.
Más de cuatro décadas después, el Serie 3 sigue siendo el producto más vendido de la firma de Munich a nivel global. En nuestro mercado, la séptima generación fue presentada el año pasado en las versiones 330i Sportline y 320i Sportline, a las que recientemente se sumó el M340i xDrive, la opción más deportiva y potente, como antesala del más extremo M3 que será develado este mismo año.
Cual es la diferencia entre motor m40 y m46.?
Nos sumamos
Es hermoso desde cualquier angulo; no le tocaría nada porque me encanta el estilo clásico de motores aspirados con carburador y la sobriedad característica alemana. Es «el» auto a comprar para envejecer contigo.
Si hay algo que BMW siempre supo hacer fue motores horrendos.
El 320 E21 con el weber de 4 bocas era una basura.
Todos los que tuvieron Vanos eran bombas de tiempo.
Muy bonito, muy dinamicos, pero siempre tan experimentales que de fiabilidad habia que mandarlos a marzo o prenderlos fuego
Por favor, que lindo que es¡¡¡ 45 años después tiene una pinta que le pasa el trapo a varios de los actuales. Si sacaran una reedición de este modelo, pero con motor y tecnología actual sería un boom de ventas. Hay autos que serán clásicos por siempre, no tienen edad. Un verdadero maestro el que lo diseñó.