El Volkswagen Jetta –denominado Vento en Argentina- es uno de los autos más vendidos de México y es el sucesor del Classic –Bora-, que logró sobrevivir varios años conviviendo con las generaciones posteriores debido a su altísima demanda. Para cubrir ese hueco y apuntar principalmente a las empresas de flotas, como taxis, vehículos de alquiler o simplemente para quien busque un sedán mediano familiar, la marca alemana presentó en aquel país el Jetta Startline, una nueva versión de entrada de gama que se destaca por utilizar el conocido motor 1.6 MSI de 110 CV.
Como suele suceder en este tipo de versiones, para lograr un precio accesible se eliminaron todo tipo de accesorios no esenciales, buscando simplificarla al máximo: adiós a los faros de Led, luces antiniebla o llantas de aleación. En su lugar cuenta con faros halógenos y embellecedores plásticos –tazas-.
Puertas adentro, el habitáculo también fue despojado de accesorios o detalles superfluos, aunque mantiene una correcta dotación de equipamiento: aire acondicionado manual, levantavidrios eléctricos, equipo de audio con pantalla a color (no es táctil). El tapizado es de tela, cuenta con instrumental analógico en lugar del Active Info Display 100% digital, pero conserva los más importantes 6 airbags, frenos a disco en las cuatro ruedas con ABS/EBD/BA y el control de estabilidad junto con una muy aceptable calidad de materiales y terminaciones.
Mecánicamente, tal como señalamos en el título y en el primer párrafo, deja de lado el más moderno motor naftero 1.4 TSI de 150 CV por el mucho más convencional propulsor 1.6 MSI de 110 CV, asociado únicamente a una caja automática con convertidor de par de 6 velocidades. Es exactamente la misma configuración del Virtus, que curiosamente en México tiene un precio superior a este Jetta Startline: el “Vento” cuesta $289.990 (pesos mexicanos), mientras que la lista de precios del Virtus arranca en $309.990.
No llamará la atención y en esta versión básica su aspecto se vuelve aún más sobrio y sencillo que en el resto de la gama, pero sin dudas para quien busque un vehículo para uso diario, sacrificando algunos ítems de confort, pero manteniendo un buen nivel de seguridad y con un motor ya probado, resulta una alternativa realmente atractiva. Lamentablemente, no está prevista la incorporación de la variante Startline en nuestro país pero ¿No sería interesante contar con más versiones de este tipo?
Orgullosamente de México para el mundo.
sera un auto para taxis en ese mercado .
En Argentina el Jetta se comercializa con el nombre Vento y en México el Vento es el Polo de generación anterior. Saludos.
Yo tengo un Jetta 20191.4 turbo TM, no lo cambiaria por un vento
En mi opinión VW tendría que tener este vehículo entrada de gama con motor 2.0 aspirado como el nuevo Corolla (170 CV)
Eduardo, chequeé la ficha técnica en la página de Volkswagen México donde aún no aparece esta versión Startline. Además lo estamos comparando con el Jetta (Vento) que se comercializa en Argentina, que sólo llega en versiones Highline y GLI. No tenemos la Trendline.
Esta equivocado su artículo ya el Jetta trae todo lo que la versión Trend line, el único cambio es el motor verifiquen sus fuentes su periodismo deja mucho que desear.
Debería traer una calcomanía en el parabrisas que diga » mucho cuidado al realizar sobrepasós,en rutas de 2 manos.Distancia mínima 5 km»
Es una buena idea de VW el sacar al mercado este auto, se va a vender bien.
Y si trae full led en faros principales.
menos mal q no está en los planes de VW en traerlo, pero si deberían traer la versión R. Sería una excelente opción
No me imagino la torta que debe ser. Sin duda este es el vento menos lindo de todos. Pero es una buena opción para taxis.
Mientras aquí es considerado un «alta gama» en México ahora tiene versión para taxis…
Para países empobrecidos como Argentina, es un modelo que vendría bien. Acá la plata ya no alcanza y además un auto así no entraría a pagar impuesto al lujo