El Polo es uno de los referentes de la franja superior del segmento B en nuestro mercado, también llamado B+. Fue uno de los primeros de una tanda de nuevos productos que marcaron una clara evolución en la categoría, en diseño, tamaño, tecnología y seguridad, pero el paso de los años empieza a notarse, más aún en Europa, donde fue presentado en 2017. Es por ello que Volkswagen está trabajando en una actualización que mes a mes va perdiendo camuflaje, lo que demuestra que su estreno está cerca.
Medios de prensa del Viejo Continente lograron fotografiar a una unidad de pruebas que permitió observar más claramente dónde se concentrarán las modificaciones en el hatchback. Vale destacar que será sólo un facelift de media vida hasta la llegada de una nueva generación, algo que no ocurrirá antes de por lo menos dos años más. Como suele suceder en estos casos, los cambios serán bastante sutiles y puntuales: en el sector frontal, los faros renovarán levemente su formato para asemejarlos a los del Golf VIII. También la parrilla será más fina como en su hermano mayor. Asimismo, el paragolpes lucirá un nuevo diseño en las tomas de aire y marcos de las luces antiniebla.
De perfil el único cambio será el diseño de las llantas de aleación, mientras que en la parte trasera, los faros serán retocados, invadiendo parte del portón como en otros modelos de la firma de Wolfsburg. Por último, el paragolpes añadirá un aplique símil difusor, con doble salida de escape, también simuladas.
Por el momento no trascendieron imágenes del interior, pero se esperan algunas novedades tecnológicas: parte del tablero podría ser rediseñado para asemejarlo al del Golf, con una evolución del instrumental digital, nuevo sistema multimedia y nuevos comandos. También debería incorporar más asistentes de conducción. En nuestra región estimamos que tomará varios elementos del Nivus, como el sistema de infoentretenimiento VW Play, frenado autónomo de emergencia y control de velocidad crucero adaptativo.
Mecánicamente, en Europa sumará versiones micro-híbridas (Mild-Hybrid), denominadas eTSI que utilizarán el motor naftero 1.0 de 110 CV de tres cilindros y el más moderno y potente 1.5 TSI de 150 CV, disponibles con caja manual o automática DSG.
Su presentación se daría en los próximos meses, mientras que al Mercosur llegaría hacia finales de este año o a principios de 2022 como parte de las inversiones previstas por la marca en Brasil que fueron anticipadas por los sindicatos del país vecino.
Excelente el nuevo Polo , me gusta.
Según lo que se interpreta mejoró mucho pero se sigue viendo insulso…