Posiblemente sea uno de los autos de película más reconocidos en el mundo. El DeLorean DMC-12, la máquina del tiempo de Volver al Futuro, nuevamente es noticia por su posible vuelta a la producción. Sí, los rumores y anuncios sobre su regreso al mercado surgen cada tanto al igual que los de una posible continuación de la trilogía de Robert Zemeckis y que catapultó a la fama a Michael Fox y a Christopher Lloyd como Marty McFly y el Doc Emett Brown. En este caso, el biplaza construido en acero inoxidable podría adoptar una mecánica completamente eléctrica en lugar del vetusto V6 de PRV.
Así lo dio a entender la DeLorean Motor Company, una empresa texana que en 1997 adquirió los derechos de la marca fundada por John DeLorean para encargarse de las reparaciones y el mantenimiento de sus autos. Además, como cuenta con un importante lote de piezas, desde hace años viene planeando volver a ensamblar la icónica coupé con puertas alas de gaviota diseñada por Giorgietto Giugiario.
La idea tiene lógica: la principal crítica que se le hizo en su momento al DMC-12 fue la escasa performance y cierta falta de confiabilidad del V6 de PRV –de 2.8 litros y modestos 132 CV-, desarrollado por la alianza entre Peugeot, Volvo y Renault (de ahí su nombre). Además de que este propulsor dejó de fabricarse hace décadas, hoy por hoy no estaría en condiciones de pasar ninguna normativa de emisiones y su rendimiento, tal como señalamos anteriormente, lejos está de la imagen deportiva del DeLorean. Entonces, la solución de reconvertirlo a un auto eléctrico cobra mucho sentido, más aún considerando que la marca podría aprovechar ciertas exenciones que el gobierno de Estados Unidos otorga a fabricantes de autos de bajo volumen (Low Volume Motor Manufacturers Act) como la ausencia de airbags y otros sistemas de seguridad que sí se les exige a grandes automotrices. Otra ventaja es que, dado que la industria en general se encamina hacia la electrificación, ya existe una cadena de proveedores capaces de suministrar piezas y desarrollar el tren motriz del resucitado DMC-12.
Por el momento el proyecto aguarda luz verde, pero cuenta con grandes chances de concretarse. Como antecedente, en 2011 el italiano Daniele Invernizzi también electrificó un DeLorean con una mecánica que le permitía alcanzar los 200 km/h. Por lo visto, la máquina del tiempo no tendrá problemas en superar las 88 mph ni necesitará 1,21 gigawatts para hacer funcionar el condensador de flujo.