El Tesla Model S marcó un antes y un después en la industria. Fue el producto que catapultó a la firma de Silicon Valley al éxito y reconocimiento que tiene actualmente y uno de los primeros autos eléctricos que demostró que nada tenía que envidiar en prestaciones y autonomía a un vehículo convencional. Aunque no parezca, es un modelo que ya lleva casi 9 años en el mercado, por lo que la compañía de Elon Musk viene introduciendo varias actualizaciones para mantenerlo al día y seguir sorprendiendo a propios y extraños.
Es así que el Model S acaba de estrenar su especificación MY2021 con varias modificaciones estéticas, una versión con autonomía extendida y un llamativo interior que como siempre sucede en Tesla, ya da que hablar. En el exterior, la principal diferencia radica en el diseño del paragolpes, con la parte inferior más prominente y trazos rectos más marcados. También cambia el diseño de las llantas y desde la anterior actualización, el marco de las ventanillas y las manijas de las puertas son de color negro.
Donde Tesla sorprendió es en el interior, ya que se rediseñó por completo el tablero, con una plancha frontal de aspecto más tridimensional y completamente minimalista. Como en el Model 3, se destaca la ausencia de comandos físicos, las salidas de aire están ocultas y se puede elegir entre una amplia variedad de revestimientos, con apliques de madera como la unidad de las fotos. La enorme pantalla que antes estaba integrada a la consola central y en formato vertical, ahora sobresale del tablero como una suerte de tablet de 17” con un sinfín de funciones y un display adicional para el instrumental. Sin dudas, el detalle más polémico es el volante, con un diseño que recuerda a los utilizados en la Fórmula 1, al yoke de un avión o para los más nostálgicos, al de KITT de la serie El auto fantástico, por la parte superior del aro recortada. Más allá de lo difícil que será para la marca homologarlo por cuestiones de seguridad, lo más probable es que se trate de una movida de marketing como las que suele realizar Tesla para que todos hablen de sus productos, ya que en el configurador oficial aparecen imágenes con un volante convencional. Las clásicas palancas para accionar las luces de giro o el limpiaparabrisas fueron reemplazados por botones en el volante. Por supuesto cuenta con el avanzado sistema de conducción autónoma Autopilot y numerosas funciones y aplicaciones online con actualizaciones a distancia.
Mecánicamente, la mayor novedad es que la versión Plaid + incrementó su autonomía hasta los 840 kilómetros, siendo uno de los autos eléctricos con mayor rango de utilización. Asimismo, esta variante cuenta con una potencia de 1.110 CV que le permiten acelerar de 0 a 100 km/h en 2,1 segundos y alcanzar los 320 km/h de velocidad máxima. La versión Long Range, más “convencional” por así decirlo, dispone de una autonomía de 663 kilómetros. Su potencia no fue declarada, pero puede acelerar de 0 a 100 km/h en 3,2 segundos y alcanzar los 250 km/h de velocidad máxima.
La producción del Tesla Model S MY2021 comenzará durante este primer trimestre, aunque la compañía no especificó la fecha en la que realizarán las primeras entregas. A modo de referencia, en Estados Unidos sus precios arrancan en U$S 72.990 hasta U$S 132.990, pero pueden variar de acuerdo a la configuración elegida.
