Audi está trabajando fuertemente en su gama de vehículos eléctricos, desarrollando varios productos en simultáneo. Uno de ellos es el e-tron, modelo que fue anticipado a mediados del año pasado en su variante Sportback –con estilo tipo coupé- a través de un prototipo, muy cercano a la versión de producción. Ahora, la firma de Ingolstadt volvió a mostrar un adelanto, pero esta vez de la versión convencional y con el interior definitivo.
Apuntando principalmente a rivales como el Tesla Model Y junto con el Mercedes-Benz EQB –la futura versión eléctrica del GLB-, el Q4 e-tron medirá alrededor de 4,59 metros de largo, 1,86 metros de ancho y 1,61 metros de alto, ubicándose en el segmento C. Estéticamente, el sector frontal está inspirado en su hermano mayor, el e-tron y en los SUV’s más grandes de la marca, como el Q8, con una figura que combina trazos rectos con músculo y formas angulosas. Allí, lo primero que llama la atención es que al igual que el renovado Q5, cuenta con faros Oled, que serán personalizables: el conductor podrá elegir el diseño de la firma luminosa según el modo de conducción seleccionado. También sobresale la enorme parrilla hexagonal carenada –no tiene una función de refrigeración- y las tomas de aire de los extremos del paragolpes, que contribuyen a darle una imagen muy agresiva.
De perfil también lucirá un diseño bastante similar al Q5, especialmente en la variante convencional, con el típico remate posterior de los SUV’s de Audi, con la tercera ventanilla sobre el pilar C, que adoptará un estilo tipo fastback en el caso de la versión Sportback.
Ahora sí, momento de hablar de lo más interesante, su interior: la versión de producción toma las líneas principales y el estilo del prototipo, dejando de lado los detalles más superfluos o llamativos típicos de un concept. Tal como los últimos productos presentados por Audi, se destaca por un diseño mucho más arriesgado y de aspecto tridimensional, dejando de lado la habitual sobriedad que caracterizaba a la marca. No faltan los gadgets tecnológicos, como el instrumental 100% digital ni dos pantallas adicionales, una para el sistema multimedia y otra para operar los mandos del climatizador. La principal diferencia con respecto al prototipo está en el color de los revestimientos –de un tono claro en el concept y negro en la versión de producción- y en la apariencia más minimalista del prototipo versus la más convencional en el modelo definitivo, con más teclas, botones y detalles en aluminio. Mención aparte para la incorporación de un Head-Up Display de realidad aumentada que proyecta información en el parabrisas sobre la navegación, autonomía restante, velocidad, etc. y será ofrecido como opcional.
Mecánicamente, el Q4 e-tron compartirá la plataforma MEB con Volkswagen, más precisamente con el ID.4, por lo que podemos tomar como referencia sus configuraciones: en el caso de la opción más potente, utilizaría el motor de 306 CV alimentado por un paquete de baterías de iones de litio de 82 kWh que estarán ubicadas sobre el piso del vehículo y, según la versión, podrá proporcionarle una autonomía de alrededor de 500 kilómetros según el ciclo WLTP. Como era de esperarse, el Q4 e-tron cuenta con tracción integral quattro, respetando la herencia histórica de la compañía. Según la firma de los anillos, podrá acelerar de 0 a 100 km/h en 6,3 segundos y alcanzar una velocidad máxima limitada electrónicamente de 180 km/h.
Con estos anticipos, se confirma que falta cada vez menos para su presentación: el Q4 e-tron y el Q4 e-tron Sportback serán lanzados hacia el segundo semestre de este año, cuando se inicie su producción.
