¿Será este el futuro del A6 o simplemente una nueva versión? Las dos opciones pueden ser ciertas. A corto plazo, podría ser una variante para complementar la oferta del sedán que ya cuenta con mecánicas mild-hybrid, pero pensando en unos seis años –o menos- bien podría ser su reemplazo ya que la industria automotriz en general va camino a la electrificación total. Por lo pronto, Audi acaba de presentar en el Salón de Shanghai el nuevo A6 e-tron, que según la propia marca, está muy cerca de la versión de producción.
Desarrollado sobre la plataforma modular PPE -creada en conjunto con Porsche-, muestra un estilo mucho más deportivo que el A6 convencional, casi como el de un A7 Sportback, especialmente por el remate posterior tipo fastback. El sector frontal es muy similar a otros e-tron, con la parrilla single frame hexagonal completamente carenada y una máscara negra que se extiende hacia las tomas de aire de los extremos del paragolpes. Los faros de Led son mucho más finos y el resto de su carrocería muestra trazos y nervaduras más marcadas, aunque con detalles minimalistas, como los espejos y la ausencia de manijas para las puertas, que dejan una importante superficie limpia en los laterales. Mención aparte para las enormes llantas de 22 pulgadas con terminación diamantada que ayudan a darle ese imponente porte. Claro que en ello también colaboran sus medidas: 4,96 metros de largo, 1,96 metros de ancho y 1,44 metros de alto.
Tal como señalamos anteriormente, la propia firma de Ingolstadt asegura que el 95% de su diseño y características se mantendrá en el modelo de producción. Eso sí, aún no conocemos el diseño del interior más que por algunos bocetos. Al igual que en el Q4 e-tron, promete destacarse por su nivel de tecnología, con varias pantallas en el tablero para la mayoría de las funciones y posiblemente el sistema de cámaras en lugar de espejos retrovisores.
Volviendo a la plataforma PPE (Premium Platform Electric), será la misma de la próxima generación del Porsche Macan –que pasará a ser 100% eléctrico-. En este caso, tendrá dos motores con una potencia combinada de unos 469 CV y 800 Nm de torque, alimentados por un paquete de baterías ubicado entre ambos ejes con una capacidad de 100 kWh, lo que le permitirá recorrer hasta 700 kilómetros con una sola carga según el ciclo WLTP. Otro atributo importante es su arquitectura de 800V, apta para cargas rápidas de hasta 270 kW de potencia. Así, podrá recuperar 300 kilómetros de autonomía en apenas 10 minutos. Inclusive, en 25 minutos llegará a reabastecerse en un 80%.
¿Cuándo llegará al mercado? Su arribo a los concesionarios aún no tiene una fecha definida, sí se sabe que a partir del segundo semestre de 2022, Audi comenzará a lanzar varios productos que utilizan esta arquitectura PPE para los segmentos C, D y E.