Casi en paralelo con el reemplazante del Citroën C3 para nuestra región, Peugeot también está trabajando en su propia propuesta aprovechando la versión simplificada de la plataforma CMP que utilizará la firma del doble chevrón. Conocido internamente como Proyecto P44, será un B-SUV cuya denominación definitiva, siguiendo la nomenclatura de la marca, sería 1008 y tendrá dos variantes, una 100% eléctrica para el mercado europeo y otra convencional para los mercados emergentes.
Los primeros rumores surgieron el año pasado en la web francesa L’argus, pero ahora llegó más información de medios de prensa brasileños, ya que este nuevo producto sería fabricado en Brasil. Mientras que el sucesor del C3 tendrá un posicionamiento más accesible, el modelo de Peugeot buscará transmitir una mayor sensación de refinamiento y sofisticación. El 1008 contaría con una estética inspirada en sus hermanos mayores, aunque con formas más cuadradas o cúbicas a fin de aprovechar mejor el espacio y sus reducidas dimensiones. Curiosamente, también podría plantearse como un sucesor para el llamativo pero poco exitoso 1007, lo que reflejaría también el cambio en las preferencias del público: el 1007 fue creado durante el auge de los monovolúmenes y se caracterizaba por sus dos puertas corredizas eléctricas. El nuevo 1008 se gestará en pleno auge SUV y en la transición a la electrificación.
Siguiendo con esta idea de mayor refinamiento y sofisticación, el B-SUV promete destacarse por su equipamiento de seguridad, con 6 airbags, control de tracción y estabilidad, así como un paquete de asistencias a la conducción, con frenado autónomo de emergencia, alerta de punto ciego y alerta de cambio de carril involuntario, entre otros ítems.
La pregunta que muchos se hacen es ¿Pero Peugeot ya no cuenta con un B-SUV? Sí, el 2008, que en nuestra región recibirá una nueva actualización para estirar su ciclo comercial. Este segundo restyling le permitirá sobrevivir hasta 2025, año en que se espera sea presentado el nuevo 1008. Ese mismo año también debería llegar, por fin, la segunda generación del 2008, ofreciendo así un portfolio completo y renovado.
Mecánicamente, el nuevo B-SUV deberá aprovechar la formación del Grupo Stellantis, utilizando el motor naftero Firefly 1.0 turbo que debutará este año en el Fiat Pulse y que también se espera que sea incorporado por el Peugeot 208 y el Citroën C3 regional.
La explicación de por qué sería fabricado en Brasil, considerando que la idea inicial era que los productos de Peugeot sean producidos en Argentina y los de Citroën en Brasil es que justamente la versión simplificada de la plataforma CMP está radicada en la planta de Porto Real, mientras que el complejo industrial bonaerense cuenta con la variante original.
