Cerca del final: el Renault Sandero R.S. habría dejado de producirse en Brasil

El Sandero R.S. fue un producto por demás especial: volvió a convertir en tendencia a los hot-hatch del segmento B, destacándose además por un precio más accesible que sus competidores y por ser el único desarrollo de la división Renault Sport fuera de Francia y exclusivo para nuestra región. Sin embargo, todo parece indicar que llegó su final: la marca francesa habría discontinuado su producción este mismo mes.

Así lo revelan nuestros colegas de Quatro Rodas, aunque por el momento no hubo confirmación oficial por lo que decidimos señalarlo en potencial. De acuerdo a la publicación brasileña, el último lote de 130 unidades fue fabricado a lo largo de septiembre, de las cuales 100 unidades serán destinadas al mercado local y las 30 restantes serán enviadas a nuestro país.

El motivo, al igual que otros vehículos que fueron o serán discontinuados, son las nuevas normativas de emisiones Proconve PL7 que entrarán en vigencia en Brasil el año que viene y que prohíbe la comercialización de 0km que no se adapten a esta reglamentación desde marzo de 2021. El rendidor pero ya viejo motor F4R de 2.0 litros y 145 CV no cumple con la normativa y actualizarlo requeriría una considerable inversión, por lo que se decidió reemplazarlo en la Duster, Duster Oroch y Captur por el moderno 1.3 TCe de 155/170 CV. ¿Podría suceder lo mismo con el Sandero? Si bien en un momento se estudió esa posibilidad, tiempo después terminó descartándose porque su incorporación elevaría demasiado su precio y ya es un modelo que atraviesa los últimos años de su ciclo comercial. Para peor, hace unos días atrás se conoció la decisión de Renault de no producir la nueva generación del Sandero/Logan en la región para darle prioridad a los SUV’s y crossovers.

El segundo motivo de su salida de la línea de montaje es que la planta de Sao José dos Pinhais estuvo paralizada durante agosto por la falta de semiconductores, problema que aqueja a todas las automotrices a nivel global y que obliga a reducir la gama de versiones para intentar cumplir con la demanda. Incluso, en el país vecino, las versiones 1.6 también fueron discontinuadas y sólo se mantienen las equipadas con el motor 1.0 SCe.

¿Qué pasará en nuestro mercado? Por el momento, hay dos posibilidades: la más probable es que, efectivamente, esas 30 unidades sean las últimas disponibles del Sandero R.S. –sería un gran aliciente si la marca las comercializara como edición especial, numeradas, como ocurrió con los últimos Mégane R.S.-. La otra, casi improbable, es que se retome la producción hacia fin de año y sólo para exportación como sucede por ejemplo con el Toyota Etios, aunque el pequeño volumen de ventas tampoco lo justificaría.