La idea no era mala y seguía la tendencia de muchos otros productos ofrecidos en Europa o en nuestra región, “vestir” a un hatchback tradicional con un look más aventurero buscando captar nuevos clientes. Sin embargo, no dio el resultado esperado: el A1 Citycarver nunca logró que sus ventas despegaran, por lo que Audi decidió rebautizarlo como A1 allstreet y ya prepara su relanzamiento en Europa.
Este cambio en su denominación fue hallado por nuestros colegas del Viejo Continente, que se encontraron con la novedad al ingresar a la web de la firma de Ingolstadt. Se trataría simplemente de un nuevo nombre, buscando llamar la atención del público, pero sin otras modificaciones respecto al Citycarver presentado en 2019.´
Repasemos sus características: esta versión se diferencia, en primer lugar, por la parrilla octogonal, que es más grande y en lugar de tres entradas de aire frontales, cuenta con dos. Además, las entradas de aire ubicadas en los extremos del paragolpes también ganaron en tamaño y están inspiradas en los SUV’s de la marca, como el Q7 o Q8. El sector inferior del paragolpes agrega además una protección símil aluminio.
En los laterales, los pasarruedas y la parte inferior de las puertas cuentan con protecciones y zócalos en color negro con terminación brillante –también el techo está pintado en ese tono- junto con un diseño exclusivo para las llantas de aleación. Más allá de estos detalles estéticos, la firma de Ingolstadt también retocó la suspensión, con una puesta a punto específica y un mayor despeje –aumentó la altura libre al suelo en 3,5 centímetros-. En la parte trasera, el rediseñado paragolpes termina de redondear esta propuesta pseudo off road con dos salidas de aire con marco negro y un aplique en aluminio en la parte central.
En cuanto al interior, también recibió un tratamiento estético específico, con varios detalles en color naranja en el tablero, la consola central y el marco de la selectora, color que se repite en el revestimiento de las butacas. Está disponible con terminaciones Advanced, Design Selection y S-Line. Al igual que al A1 Sportback, ofrece un completo nivel de equipamiento, especialmente en cuanto a asistencias a la conducción, con control de velocidad crucero adaptativo, sistema de frenado de emergencia con detección de peatones y ciclistas, alerta de cambio de carril involuntario o asistente de estacionamiento.
Mecánicamente, mantiene gran parte de la oferta del A1 Sportback, con los propulsores nafteros 1.0 TFSI de 95 CV y 115 CV, así como el 1.5 TFSI de 150 CV con sistema de desconexión automática de cilindros, disponibles con caja manual de 6 velocidades o automática S-Tronic, sólo con tracción delantera.
¿Logrará despegar con este cambio de denominación? Más allá de su éxito –o no-, la suerte del A1 ya está echada: Audi confirmó que finalizado el ciclo comercial de la actual generación, no tendrá reemplazante.