Con muchas las automotrices que desarrollan y fabrican productos exclusivos por y para China por varias razones, pero especialmente por la altísima demanda y los requerimientos particulares de dicho mercado que justifica semejante inversión, que muchas veces es compartida con las joint-venture que poseen con marcas locales. El Grupo Volkswagen es uno de los que cuenta con más modelos específicos para el Gigante Asiático, incluyendo también a Audi, que acaba de presentar el nuevo Q6.
Si su apariencia resulta un tanto extraña o diferente a otros productos de la firma de Ingolstadt es porque, en realidad, tiene poco de la marca de los anillos: es, en esencia, un derivado de Audi desarrollado sobre la base del Volkswagen Atlas/Teramont, lo que queda evidenciado en varios detalles estéticos. Eso sí, para acercarlo al family feeling, cuenta con su propia impronta, especialmente en el sector frontal, con la parrilla hexagonal singleframe, faros de Led finos y alargados y dos grandes tomas de aire/canalizadores en los extremos del paragolpes que sirven a la vez como marco para las luces antiniebla.
De perfil es donde más se nota que no es un Audi “puro” sino una reinterpretación hecha sobre otro producto, sobre todo en el diseño de las puertas, las ventanillas y la línea de cintura. La parte trasera también denota cierta adaptación forzada para asemejarlo a otros modelos de la marca, especialmente en los faros –que se extienden sobre el portón- y el paragolpes con salidas de aire falsas.
Puertas adentro, la sensación es la misma: se nota un intento por acercarlo a los productos globales de Audi, pero sobre la base de un Volkswagen, con detalles típicos de la firma de Wolfsburg como las salidas de aire. Sí busca reflejar una ambientación más sofisticada y tecnológica, con instrumental digital, una enorme pantalla para el sistema multimedia y otra adicional para el climatizador.
Creado sobre la plataforma MQB Evo y desarrollado en alianza con SAIC, el Q6 mide 5.099 mm de largo, 2.014 mm de ancho, 2.044 mm de ancho y 1.784 mm de alto, con una distancia entre ejes de 2.890 mm, dimensiones bastante similares a las del Q7 pero muy por debajo de su nivel de refinamiento.
Mecánicamente, como muchos de los vehículos del Grupo VW que utilizan esta arquitectura, está impulsado por el motor naftero 2.0 TFSI/TSI (EA888), que en este caso se ofrecerá con dos niveles de potencia, 231 CV para la versión 40 TFSI y 266 CV para la variante 45 TFSI. También estará disponible la variante 50 TFSI, con un V6 de 299 CV. Todas cuentan con caja automática y tracción integral quattro.
Tal como señalamos anteriormente, el Q6 se comercializará sólo en China, de hecho, Audi está trabajando sobre un SUV eléctrico que llevará esta misma denominación pero que sí será global.
