Los sistemas de seguridad para los vehículos vienen avanzando rápidamente de la mano de la tecnología y en ese sentido, la llegada de la Inteligencia Artificial (IA), acelera aún más el proceso y brinda un sinfín de posibilidades. Como referente en soluciones de todo tipo para la industria, Bosch firmó una alianza con Microsoft para investigar el uso de IA generativa para mejorar la comodidad en el vehículo y aumentar la seguridad de todos los usuarios en la ruta.
Un claro ejemplo son los sistemas de asistencia a la conducción: una pelota rodando por la calle, a la que seguramente le siga inmediatamente detrás un niño ajeno al tráfico. Pero mientras que los conductores humanos pueden evaluar esta situación utilizando sus conocimientos contextuales, los actuales sistemas de conducción asistida y automatizada todavía tienen que aprender a hacerlo. Es ahí donde Bosch busca perfeccionar las capacidades de la IA generativa para seguir mejorando las funciones de conducción automatizada.
A través de este acuerdo, ambas compañías prevén que una colaboración llevaría al siguiente nivel el rendimiento de las funciones de conducción automatizada, ya que la IA generativa podría contribuir a mejorar la comodidad en el vehículo y a proporcionar más seguridad a todos los usuarios. Incluso hoy en día, cuando se trata de entrenar sistemas para la conducción automatizada, la IA se topa irremediablemente con sus límites: los sistemas actuales de asistencia al conductor pueden detectar personas, animales, objetos y vehículos, pero en un futuro próximo la IA generativa podría ayudar a determinar si una situación podría provocar un accidente. Esta herramienta utiliza grandes cantidades de datos para entrenar a los sistemas de conducción automatizada, permitiéndole extraer conclusiones mejoradas a partir de estos datos.
De esta manera, en un futuro podría deducir si un objeto en la calle es una bolsa de plástico o una pieza dañada del vehículo. Esta información se podría utilizar para comunicárselo directamente al conductor mostrando, por ejemplo, una advertencia, o para iniciar maniobras de conducción adecuadas, como frenar encendiendo las luces de emergencia. Para ello, Bosch y Microsoft se asociaron para desarrollar una plataforma de software universal que conecte continuamente los vehículos y la nube, y buscan trabajar juntos para identificar nuevas oportunidades de aportar tecnología de IA de vanguardia a sus clientes y a la industria de los vehículos autónomos.
Al respecto, Stefan Hartung, presidente del consejo de administración de Bosch, afirmó: «Bosch está trabajando para llevar una nueva dimensión de las aplicaciones de inteligencia artificial al vehículo». Por su parte, Tanja Rueckert, miembro del consejo de administración de Bosch y CDO, agregó: “La IA generativa es un impulso a la innovación. Puede transformar la industria de una forma muy similar a la invención de las computadoras”.