Audi fue la primera marca que demostró que además de destacarse por su versatilidad y espacio, no hay que encasillar a las rurales sólo para un uso familiar, sino que también pueden ser muy divertidas de manejar y transmitir las mismas sensaciones y performance de las berlinas. El primer paso lo dio con el recordado RS2 Avant, seguido del S6 Plus. Sin embargo, el que consolidó la saga de rurales deportivas fue el RS 4 Avant (B5) presentado en 1999. A partir de allí nació una saga que permanece vigente hasta el día de hoy y le hace frente a los SUV’s. Como tributo a aquel primer modelo de la división RS, la firma de Ingolstadt presentó el RS 4 Avant Edition 25 Years.
Se trata de una serie especial limitada a solo 250 unidades que se destaca por su personalización inspirada en aquel modelo de 1999, comenzando por su llamativo color Amarillo Imola (aunque también está disponible con los tonos Gris Nardo y Negro Mythos) junto con llantas de aleación de 20 pulgadas, con una terminacion bitono de color negro en el exterior y un tono aluminio en su interior. Las mismas están calzadas con neumáticos Pirelli PZero Corsa para ruta y circuito, pero también se ofrece como opción un segundo juego de neumáticos desarrollados para Audi, los PZero Trofeo RS semi-slick con sensores y el sistema Pirelli Track Adrenaline que miden en tiempo real la presión y la temperatura de las cubiertas, datos que son transmitidos al celular y a la vez a la pantalla del sistema multimedia MMI a través de la compatibilidad con Apple CarPlay y Android Auto. Además, los propietarios recibirán botas especiales de Alpinestars.
Siguiendo con sus detalles estéticos exclusivos, posee los marcos de las ventanillas pintados en negro, al igual que la carcasa de los espejos y la máscara de los faros tanto delanteros como traseros, que cuentan además con tecnología Matrix Led. Asimismo, el emblema RS 4 Edition 25 Years fue grabado en los pilares C y D.
Puertas adentro, se destacan los revestimientos de cuero/alcántara específicos con un entramado tipo panal de abejas, con costuras en amarillo y emblemas RS bordados. El tablero posee apliques en fibra de carbono, iluminación ambiental y alfombras negras con los bordes también de color amarillo. Como detalle adicional, la visualización del instrumental agrega un modo que simula un indicador analógico para el tacómetro con los números en blanco, tal como el RS2 Avant, que fue el primero en contar con iluminación en dicho color. Por supuesto, incluye una placa con el número de unidad.
Mecánicamente, está impulsado por un motor naftero V6 biturbo que entrega 470 CV y 610 Nm de torque, un plus de 10 CV respecto al RS 4 Avant convencional, asociado a la caja automática S-Tronic d e7 marchas. Puede acelerar de 0 a 100 km/h en 3,7 segundos y alcanzar una velocidad máxima de 300 km/h. Adicionalmente, dispone de la suspensión deportiva RS Pro, 10 mm más baja que la versión de serie, diferencial Torsen y sistema de tracción quattro, que en condiciones normales prioriza la tracción sobre el eje trasero.