La electrificación es el futuro, sí, pero la transición no será tan rápida como se preveía y las automotrices están recalculando y readaptándose a estos cambios. Una de las que debió dar un fuerte golpe de timón fue General Motors, que en un principio apostaba todo por los eléctricos, sin intermedios, y ahora tuvo que retroceder y volver a desarrollar híbridos. En ese proceso de transformación, hay un factor que será clave: la flexibilidad. Para ahorrar costos, General Motors busca producir vehículos con motor de combustión y eléctricos en la misma línea de montaje.
Así lo reveló Mark Reuss, presidente global de GM en una entrevista con Automotive News en la que señaló que la compañía está realizando grandes inversiones para adaptar las plantas actuales, que fabrican vehículos con motor de combustión interna, a la producción de eléctricos en simultáneo. Por supuesto, también habrá complejos industriales dedicados exclusivamente a los EV’s.
El ejecutivo destacó que la conversión de plantas representa una gran inversión, pero que es mucho menor en comparación con la construcción de una totalmente nueva. “La flexibilidad es una ventaja, pero tenemos que seguir invirtiendo en vehículos de combustión”, reconoció y agregó que de esta manera, se podrá optimizar la capacidad de producción de ambos tipos de vehículos de acuerdo a la demanda de los clientes.
Tal como señalamos anteriormente, si bien la transición será mucho más lenta de lo esperado, GM mantiene su objetivo de comercializar sólo vehículos eléctricos de pasajeros hacia 2035, por lo que su desarrollo sigue en curso. «El mercado de vehículos eléctricos está creciendo, pero a un ritmo más lento. La infraestructura de carga también se está desarrollando, pero no tan rápido como nos gustaría», explicó el directivo. En ese sentido, la caída en la demanda de EV’s, obligó a la compañía a retrasar algunas de sus inversiones, de hecho, reprogramó el inicio de producción de la Silverado EV en la planta de Orion (Michigan) para mediados de 2026, al igual que el primer eléctrico de Buick.
Por otra parte, también trabaja en la renovación del Bolt, cuyo sucesor utilizará la plataforma Ultium y continuará fabricándose en el complejo industrial de Fairfax (Kansas): “Tuvimos que discontinuar el Bolt para reformar la fábrica. Ahora transformaremos otra planta para construir el próximo Bolt, asegurándonos rentabilidad y presencia en el mercado de entrada de gama”, indicó Reuss.