Porsche es una especialista en el desarrollo de motores, sus propulsores bóxer, V6 y V8 son ejemplo de performance y eficiencia, pero en los últimos años la firma de Stuttgart quiso enfocarse de lleno en la electrificación viendo el gran resultado que estaba teniendo a priori el Taycan y pensaba apostar de lleno por los eléctricos a excepción del mítico 911, que seguiría con un motor de combustión hasta que las legislaciones lo permitan. Sin embargo, ante la caída estrepitosa de la demanda de EV’s, la compañía tenía que pegar un fuerte volantazo si quería evitar entrar en una crisis que ya afecta a todo el Grupo Volkswagen.
Si bien se ve afectada por aquella decisión, la marca parece haber reaccionado a tiempo y acaba de anticipar que seguirá desarrollando motores de combustión mientras exista demanda, algo que podrá salvar a productos como el nuevo Macan y las próximas generaciones del Cayenne y los 718 Boxster y Cayman. De acuerdo a la web Automotive News, el director financiero de la compañía, Lutz Meschke, señaló: “En el segmento Premium y de lujo, hay una clara tendencia hacia los vehículos con motor de combustión interna, asi que reaccionaremos en nuestro ciclo de producción”.
Considerando la caída en las ventas de EV’s, especialmente en China, el antiguo objetivo de que para 2025 los eléctricos representen el 50% de sus ventas, está muy lejos. En ese sentido, Porsche tuvo que rever su planificación y aunque seguirá desarrollando eléctricos, sus próximos productos también tendrán versiones de combustión, como la siguiente generación del Cayenne, que será presentada hacia fines del año que viene o principios de 2026. Lo mismo sucederá con el Panamera, recientemente renovado, por lo que el a esta altura ya clásico V8, seguirá formando parte del portfolio, incorporando mejoras para adecuarse a las nuevas normativas.
Para alegría de los más puristas, los motores tradicionales tienen el futuro asegurado por bastante tiempo más: «Estamos estudiando la posibilidad de que los vehículos totalmente eléctricos previstos en un principio cuenten con una propulsión híbrida o un motor de combustión. Actualmente estamos en pleno proceso de toma de decisiones. Lo que está claro es que seguiremos utilizando el motor de combustión durante mucho más tiempo del previsto», reconoció Meschke.
