Hace seis años atrás, Toyota decidió revivir al icónico Supra, con una nueva generación que, para reducir costos de desarrollo compartía plataforma, motorización y numerosos componentes con el BMW Z4, algo que al principio generó polémica entre los fanáticos del deportivo nipón, pero la compañía se encargó de darle su propia puesta a punto e incluso ofrecer extras como la caja de cambios manual. Con la inminente salida de producción del roadster alemán, a la coupé japonesa también le queda poco tiempo por delante y para despedirla como se merece, la división Gazoo Racing creó dos series especiales.
Denominada A90 Final Edition, se destaca por su estética más agresiva, con detalles como la toma de aire sobre el capot, las llantas de aleación forjadas de 19 pulgadas adelante y de 20 pulgadas atrás, calzadas con neumáticos Michelin Pilot Sport Cup 2, frenos a disco Brembo perforados, pintura en coor negro mate y el alerón trasero tomado del GR Supra GT4.
Puertas adentro, agrega butacas deportivas Recaro tipo baquet tapizadas en color rojo, con revestimientos en cuero y alcántara también con la combinación bitono rojo y negro, al igual que los cinturones de seguridad.
Mención aparte para lo más interesante: bajo el capot mantiene el motor de 6 cilindros en línea, 3.0 biturbo, pero llevado hasta los 435 CV (340 CV en la versión de serie), sólo asociado a la caja manual de 6 marchas. También posee resortes y amortiguadores ajustables, diferencial electrónico, barras estabilizadoras reforzadas y una respuesta de la dirección más directa. Con todos estos cambios, puede alcanzar los 270 km/h, mucho más que los 250 km/h de la versión estándar. Además, su puesta a punto se llevó a cabo en el circuito de Nürburgring.
La segunda serie especial es un poco más sobria: bajo el nombre Lightwight Evo suma varios elementos en fibra de carbono y agrega diferencial trasero activo, barra estabilizadora delantera reforzada y nuevos soportes de goma para las suspensiones.
Por el momento, no se informó cuántas unidades estarán disponibles ni su precio. Sólo se sabe que la marca comenzará a tomar los pedidos a partir de enero de 2025 y, cuando se agoten, será el final del actual GR Supra. Afortunadamente, no es tan mala noticia: Toyota ya confirmó que está trabajando en una nueva generación y esta vez sí estará a cargo de todo el desarrollo, por lo que el deportivo volvería a ser 100% japonés.