El servicio posventa y la capacitación continua de sus técnicos son pilares fundamentales para Volvo. En este contexto, la compañía organiza cada tres años una certificación global exclusiva para el segmento de buses, conocida como BKT (Bus Key Technician). En Argentina, la edición más reciente tuvo lugar el 26 y 27 de noviembre en el Centro de Entrenamiento de Volvo Trucks & Buses Argentina (VTBA).
«Esta certificación es específica de Volvo y su principal objetivo es garantizar que los técnicos que la obtienen puedan desarrollar su labor de diagnóstico y reparación en cualquier lugar del mundo con la misma precisión y conocimiento. Los 24 técnicos que participaron en esta certificación provienen de todos los puntos de servicio de la red nacional, representando a concesionarios de todo el país», explicó Fabián Krenz, instructor técnico de Volvo Trucks & Buses Argentina.
En esta ocasión, dos instructores certificados por Volvo Brasil viajaron al país para llevar a cabo las evaluaciones técnicas, como parte de un avanzado programa de formación. Durante su estadía, del 25 al 28 de noviembre, estos especialistas certificaron a 24 técnicos previamente entrenados por instructores locales.
Capacitación técnica previa:
El proceso de certificación incluyó actividades clave realizadas en concesionarios oficiales de la red Volvo. El primer evento tuvo lugar en la sucursal Sueca, en Moreno, del 17 al 19 de septiembre, y se enfocó en el diagnóstico de sistemas eléctricos y electrónicos. Por su parte, el segundo evento se llevó a cabo en Sudamericana, en Rosario, del 6 al 8 de noviembre, y estuvo dedicado a los sistemas de chasis, abordando temas como frenos, suspensión y seguridad activa, incluyendo sistemas avanzados como el frenado autónomo de emergencia.
Un enfoque adaptado al mercado local:
La capacitación en Argentina presenta desafíos únicos debido a las características del mercado local. Los buses importados por Volvo llegan como chasis, lo que requiere que sean carrozados por proveedores nacionales. En este contexto, los técnicos no solo deben dominar el diagnóstico y las reparaciones tradicionales, sino también desempeñar un rol esencial en el ensamblaje y ajuste final de los vehículos.
«Los técnicos certificados de Volvo en Argentina tienen la responsabilidad de supervisar todo el proceso de carrozado, asegurándose de que las carroceras cumplan con los estándares de calidad exigidos por la marca. Esta labor incluye, entre otras cosas, la realización de más de 100 controles específicos a través del proceso llamado PDI (Pre Delivery Inspection), que se realiza antes de la entrega final del bus al cliente”, indicó Jorge García, uno de los instructores encargados de impartir la capacitación.
Este programa de certificación subraya el compromiso de Volvo con la excelencia técnica y la adaptación a las necesidades específicas de cada mercado, asegurando que los buses cumplan con los más altos estándares de calidad y seguridad.
