Fiat fue la marca más vendida del Grupo Stellantis en 2024, pero aún así padeció una fuerte caída en ventas especialmente en el mercado europeo, con productos como el 500e que no logró la demanda esperada. Para recuperarse y como parte de su estrategia para los próximos años, la firma italiana prepara una fuerte renovación de sus productos, con el nuevo Grande Panda como el puntapié inicial y una de sus principales apuestas.
Luego de iniciada su producción, el hatchback está llegando a los concesionarios europeos y ya se conoce su configuración de versiones y equipamiento para el Viejo Continente, específicamente para el mercado italiano. Desarrollado sobre la plataforma SmartCar, se diferencia del Citroën C3 europeo con un diseño inspirado en la primera generación del Panda. Su estética destaca por formas cuadradas, faros rectangulares con firma luminosa en píxeles y detalles en la parrilla y carrocería que evocan el modelo original. De perfil, mantiene la silueta clásica de los años 80, con una línea de cintura alta y detalles como el logo de Fiat en el pilar C. En el interior, el diseño se inspira en la pista oval del edificio Lingotto, que enmarca las pantallas, junto con formas geométricas y colores que contrastan con el habitual tono negro de los plásticos y tapizados.
El Grande Panda está disponible en el mercado europeo en tres niveles de equipamiento, Pop, Icon y La Prima para las variantes con motor de combustión. La opción más accesible (Pop) cuenta con llantas de acero de 16″, faros halógenos, aire acondicionado, sistema multimedia con pantalla táctil de 10″, levantavidrios eléctricos delanteros, freno de mano eléctrico, soporte para smartphone y sensor de estacionamiento trasero. A modo de referencia, cuesta desde 18.900 euros (equivalente a un Dacia Sandero base).
Por su parte, la versión Icon añade llantas de acero de 16″ con embellecedores plásticos (tazas), faros Pixel Led, luces traseras Led, manijas de las puertas de color negro, sistema multimedia con pantalla táctil de 10,25″, levantavidrios eléctricos traseros, butacas traseras rebatibles y espejos con regulación eléctrica. Su precio es de 20.400 euros. Como opcional se ofrece climatizador automático, sensores de estacionamiento delanteros, cámara de retroceso, llantas de aleación, barras de techo y navegador.
Por último, la versión tope de gama se denomina La Prima y posee llantas de aleación de 17″, barras de techo, vidrios tonalizados, climatizador automático, butacas con tapizado de tela premium, navegador integrado, cargador inalámbrico, sensores de lluvia y de estacionamiento y puertos USB-C para las plazas traseras. Cuesta 22.900 euros y ofrece el Pack Invierno opcional, con butacas delanteras, volante y parabrisas calefaccionados.
La variante eléctrica o Grande Panda Elettrica, como lo llama la marca, está disponible en solo dos versiones: Red y La Prima. La opción de acceso cuenta con llantas de acero de 16″ pintadas en blanco, logo Red en el pilar central, faros Eco Led, espejos negros con ajuste eléctrico y luces de giro de Led, alerón trasero, manijas negras, tablero revestido en tela «Style», aire acondicionado, sistema multimedia con pantalla táctil de 10,25» con conexión inalámbrica y levantavidrios eléctricos, entre otros ítems. Su precio es de 24.900 euros (equivalente a un Renault R5 E-Tech base). La versión tope de gama es el La Prima, que cuesta 27.900 euros, con el mismo equipamiento de la variante mild-hybrid.
Tal como señalamos anteriormente, comparte con el producto del doble chevrón la plataforma Smart Car (CMP), por lo que también ofrece su misma gama de motorizaciones: en Europa para la opción de entrada de gama, estará disponible el propulsor PureTech 1.2 de 100 CV, acoplado a una caja manual de 6 marchas. La segunda opción para quienes no quieran pasarse a la electrificación total es una versión micro-híbrida, que combina el motor PureTech 1.2 de 100 CV y 205 Nm de par, con un sistema mild-hybrid de 48V y que en este caso, se asocia a una caja automática de doble embrague de 6 velocidades. Por último, la variante 100% eléctrica cuenta con un motor de 110 CV y batería LFP de 44 kWh de capacidad, que le proporciona una autonomía de hasta 320 kilómetros según el ciclo WLTP.
De acuerdo a la compañía, el Grande Panda será un producto global que será comercializado en todos los países donde Fiat tiene presencia, con leves adaptaciones. En ese sentido, medios de prensa brasileños anticipan que la nueva generación del Argo deberá ser prácticamente idéntica, tal como sucedió en su momento con el Panda y el Novo Uno. Aquí llegaría hacia 2027.
