
Sabemos que lo que más vende son los SUV’s y crossovers, que acapararon cada segmento del mercado, por eso celebramos cuando los fabricantes también siguen apostando por las opciones tradicionales como coupés, rurales y sedanes. Este es justamente el caso de Audi, que acaba de develar por fin al nuevo A6 Sedán, la nueva generación de su berlina ejecutiva y rival directo de otros dos pesos pesados de la categoría, como el Mercedes-Benz Clase E y el BMW Serie 5.
Luego de presentar el nuevo A6 Avant a comienzos de mes, la firma de Ingolstadt sumó al segundo integrante de la gama, la tradicional silueta de sedán de tres volúmenes bien definidos. Curiosamente, en lugar de apostar por una estética más deportiva como el Serie 5 y su kit M, Audi no optó por mostrar una unidad con el paquete S-Line, sino que apuntó a un estilo más elegante y refinado que lo acercan a su hermano mayor, el A8, que dicho sea de paso, ya está en el final de su ciclo comercial
Cabe aclarar que este A6 no guarda relación con el A6 e-tron, que posee una plataforma 100% eléctrica y exclusiva: mientras el eléctrico fue desarrollado sobre la arquitectura PPE (Premium Platform Electric) compartida con Porsche, el de motor de combustión utiliza la PPC (Premium Platform Combustion), en este caso compartida con el nuevo A5.
El diseño mantiene gran parte del estilo ya visto en el Avant, como el sector frontal -con líneas más redondeadas que en su antecesor- y hasta los grandes faros traseros, ahora divididos en dos niveles y un estilo bastante llamativo. Además, las salidas de escape ahora son funcionales, una respuesta directa a las críticas por los escapes falsos en generaciones anteriores.
Aerodinámicamente, el nuevo A6 se posiciona como el sedán con motor de combustión más eficiente de la historia de Audi, con un coeficiente de resistencia de solo 0,23. En comparación, el A6 e-tron alcanza un CX de 0,21 cuando se equipa con espejos-cámara. Con 4,99 metros de largo, creció 60 mm en comparación con su antecesor, aunque conserva prácticamente intacta su distancia entre ejes: 2.927 mm. Las llantas oscilan entre 21 y 23 pulgadas, con una opción forjada tricolor entre las disponibles.
Puertas adentro es idéntico al Avant e incluye un instrumental digital de 11,9 pulgadas, una pantalla central de 14,5 pulgadas para el sistema multimedia y, como opcional, una tercera pantalla para el pasajero de 10,9 pulgadas. Sin ella, el tablero deja una sensación de vacío, como si hubiera sido diseñado para contar con ese display.
Para recuperar los niveles de calidad que ostentaban sus productos anteriormente, Audi destaca que el nuevo A6 incorpora un 30% más de aislamiento acústico, incluyendo vidrios traseros laminados. Además, se rediseñaron componentes clave como los soportes del motor y de la caja de doble embrague, así como los burletes de puertas y ventanillas para lograr un habitáculo más silencioso.
Mecánicamente, la versión de entrada cuenta con un motor turbo de 2.0 litros, 204 CV y 340 Nm de par, con tracción delantera. Le sigue un V6 de 3.0 TFSI con sistema mild-hybrid, tracción integral quattro, 367 CV y 560 Nm de torque. Frente a otras marcas que decidieron eliminarlas de su catálogo, la berlina alemana continúa ofreciendo una opción diésel: el 2.0 TDI con tecnología de 48V, que entrega 204 CV y 400 Nm de par, disponible con tracción delantera o integral. En los modelos con sistema quattro, hasta el 70% del torque puede enviarse al eje trasero. Hasta la presentación del futuro S6, la variante V6 TFSI será la más prestacional de la gama: acelera de 0 a 100 km/h en 4,7 segundos y alcanza una velocidad máxima de 250 km/h. Esta versión también podrá incorporar un diferencial trasero opcional. En paralelo, el regreso del RS6 Sedán no está descartado, especialmente tras la salida del RS7 Sportback, aunque por ahora todo apunta a que el RS6 continuará siendo exclusivo del formato Avant.
La dotación tecnológica está a la altura de los referentes del segmento, con elementos como sistema de sonido de hasta 20 parlantes, climatizador cuatrizona, puertas con cierre asistido, dirección en las ruedas traseras, suspensión neumática adaptativa y un techo panorámico con opacidad regulable electrónicamente.
Las primeras entregas del nuevo Audi A6 están previstas para fines de 2025 en Alemania y luego arribará a otros mercados. En Argentina podría llegar en 2026 ya que siempre fue un modelo que formó parte del portfolio local de la marca.