Tras las tres jornadas iniciales, disputadas en caminos rectilíneos de pampas y desiertos, muy a propósito para que los regularistas mostraran todas sus condiciones en esa difícil y ya digitalizada especialidad automovilística, la cuarta jornada se caracterizó por tramos en los que priorizan el manejo y disfrutan de los caminos trazados, quedaron más que satisfechos.
Con una temperie benigna, aunque fría pese al pleno sol que se alternó con períodos nublados, la cuarta etapa comenzó atravesando el desierto nordpatagónico entre la ciudad de Neuquén y Zapala, pasando por Plaza Huincul y Cutral-có, las gemelas poblaciones petroleras del este neuquino.
A partir de Zapala, la cosa cambió: la ruta de asfalto se volvió sinuosa en las primeras estibaciones de la pre cordillera y más aún al llegar al famoso Espinazo del Zorro, ya de piso enripiado, por donde se corrieron antaño las más memorables Vueltas de la Manzana, de Turismo.
El Espinazo fue un prolegómeno para la Cuesta del Rahue, donde el paisaje se vuelve imponente y maravilla a quien haya quitado los ojos al encaracolado camino de cornisa, que sufre un marcado descenso hacia el lado de Alumine. Ahí la caravana disputó varias pruebas en un camino de ripio fino y tierra, en dirección al sur con paso por Piloil, que es digno de un rally mundial.
En la clasificación no hubo grande cambios entre los Peugeot 404 que estaban adelante y ahora acaparan los cuatro primeros puestos de la general: Mauricio Osman, Miguel Gómez Fernández, Daniel Villacé y Claudio Beatriz, en ese orden. Quinto está ahora el Falcón de Juan Manuel Castany, que volvió al liderazgo del TC y séptimo el Alfa Romeo Giulia TI del uruguayo Jorge Tomás, que sigue mandando en la C. Quien era segundo en la general, el Fiat “milqui” Carlos Dante retrogrado al 9° lugar y fue sobrepasado en los tiempos por el auto similar de Guillermo Beck, que lidera entonces la clase D. En el décimo puesto aparece la cupé Chevrolet de Cali Falabella, el mejor entre los TC tradicionales más antiguos.
Mañana martes será el único día de descanso del GP, en la bella San Martín de los Andes, una de las poblaciones de mejor calidad de vida del país, siendo un descanso merecido que necesitan los corredores.
Fotografias: Rionegro.com.ar
Un verdadero espectáculo, felicitaciones a los participantes que además tienen que lidiar con la falta de combustible en provincias como Neuquén, una de las mayores productoras de petróleo.