Volkswagen está trabajando en la renovación de su gama: ya presentó el facelift del Polo, sumó el Polo Track, en Brasil ya lanzó el facelift del Virtus y prepara también un rediseño para la Amarok, Nivus y T-Cross. Precisamente, sobre el B-SUV hay algunas novedades ya que medios de prensa brasileños aseguran que la actualización será, afortunadamente, similar a la de su par europeo.
Hace unos meses atrás se filtró el registro de diseño de la renovada T-Cross, confirmando precisamente que su exterior será como el de las versiones comercializadas en el Viejo Continente. Restaba saber, sin embargo, si los cambios también se iban a ver reflejados en su interior ya que muchas veces, por una cuestión de costos, no incorporan todas las modificaciones. Ahora, según nuestros colegas del país vecino, que habrían visto las unidades de prueba, señalan que el B-SUV producido en la planta de Sao José dos Pinhais, también contará con estas mejoras.
Tal como señalamos anteriormente, a simple vista, las modificaciones son similares a las de las versiones comercializadas en el Viejo Continente, aunque hay que tener en cuenta que el modelo sudamericano cuenta con una mayor distancia entre ejes –la misma del Virtus, en lugar de la del Polo-. El resto de los cambios parecerían ser idénticos. Comenzando por el sector frontal, si bien los faros mantienen su formato, incorporarían la tecnología IQ.Light con proyectores de Led y una firma luminosa que se extiende hacia el centro de la parrilla, que estrena un nuevo entramado. En el caso del modelo regional, este detalle podría ser reemplazado por un simple aplique cromado. El paragolpes también fue replanteado y ahora se dibuja una suerte de X como en el Taos, pero sin el aplique de color negro. La toma de aire ahora es más grande y en forma de trapecio, mientras que las luces antiniebla pasan a contar con un marco triangular cromado. El sector inferior del paragolpes agrega además un aplique de color aluminio, simulando una defensa.
De perfil, las imágenes digitalizadas también reflejan que dejó de lado las combinaciones bitono con el techo en contraste con la carrocería, para contar con un color uniforme en todo el exterior. De perfil sólo incorporará nuevos diseños para las llantas de aleación y perdió esa suerte de branquia que identificaba a la versión. Por último, en el sector posterior se rediseñó el layout interno de los faros, que ahora dibujan una suerte de X. El paragolpes agrega una franja de color negro y otra en la parte inferior con un detalle en color aluminio.
Si bien no hay imágenes del interior, la versión europea recibió importantes modificaciones: ahora ya no utiliza el tablero del Polo, sino que toda la plancha frontal fue rediseñada, con nuevas salidas de aire y una nueva disposición de la pantalla del sistema multimedia –que puede ser de 8 a 9,2 pulgadas- tipo tablet flotante, sobresaliendo del torpedo. Aquí incorporaría los mismos cambios estéticos, pero con el sistema multimedia VW Play. Además recibió una mejora en los materiales, que si bien no son soft-touch, simulan una costura. Por supuesto, mantiene el instrumental digital Active Info Display, con una pantalla de 8 a 10”.
Mecánicamente, para nuestra región no habría ningún cambio, manteniendo los motores nafteros 1.0 TSI de 95 CV y 165 Nm de par para la versión de entrada y el 1.0 TSI de 116 CV y 200 Nm de torque para las intermedias y tope de gama, con caja manual de 5 marchas para la opción más accesible y caja automática de 6 velocidades para el resto. En Brasil se ofrece además una variante con el 1.4 TSI de 150 CV y 250 Nm de par, también con transmisión automática.
La presentación del facelift de la T-Cross está prevista para principios de 2024.
Lo mejor la motorizacion moderna ( aunque sigue sin apostar a un hibrido ), empuja aun restyling de la Taos tambien ,