Hyundai se prepara para producir y lanzar la nueva generación de la Creta en Brasil, pero no será tal cual la conocemos de las imágenes del modelo indio o el que se comercializa en China. Para el país vecino y para nuestra región, la marca coreana incorporará un leve rediseño que intentará darle una imagen algo más sobria que sus pares de Asia.
Aunque en algún momento se rumoreó que quizás la segunda generación de la Creta no llegaría a nuestra región por su polémico diseño y que en su lugar, tal como ya sucede en Argentina, sería reemplazada por el facelift de la generación actual proveniente de Brasil, todo parece indicar que aquellos rumores no eran ciertos y el renovado B-SUV sí arribará a nuestras tierras.
Así lo demuestran las fotos publicadas hace un tiempo por nuestros colegas de Autos Segredos, en las que se observaba a una unidad de pruebas circulando con un espeso camuflaje en su carrocería por las calles y rutas del país vecino y ahora por Motor1, que fotografió a una unidad completamente sin camuflaje, dejando al descubierto el facelift.
La principal modificación se da en el sector frontal, con una nueva parrilla cromada y la toma de aire reubicada ahora en la parte inferior de la misma. Con este leve cambio más algunos detalles en el paragolpes, el diseño del B-SUV que despertó muchas críticas, queda mucho más discreto y sobrio.
Presentada inicialmente en China y luego en India, país donde se fabrica, el rasgo más particular de esta nueva Creta radica en el frente, que adoptó el nuevo lenguaje de diseño de la marca coreana, pero con resultado algo polémico por lo llamativo y rupturista: se destaca la enorme parrilla de formato hexagonal junto con los faros en forma de C invertida –detalle que resalta aún por la firma de las luces diurnas de Led- y que a su vez están divididos en dos, con los principales ubicados más abajo. Se buscó replicar el estilo que se inició con la Kona, pero adaptado el diseño más cuadrado de la Creta, rompiendo totalmente con la sobriedad que la caracterizaba.
De perfil, si bien su silueta es bastante similar, así como el diseño de las ventanillas, se muestra mucho más musculosa por los abultados pasarruedas y una línea que recorre todo el lateral. Además, cuenta con un aplique en la parte del techo pintado en otro color, contrastando con la carrocería.
La parte trasera también repite la fórmula del sector frontal, con faros de gran tamaño y divididos en dos. Se destaca la incorporación de trazos más marcados y un tratamiento de los volúmenes o de los paneles de la carrocería más llamativo y tridimensional. Rematan este sector un spoiler de techo más prominente y el paragolpes con un aplique de color negro –presente también en todo el sector inferior- y otro de color aluminio, simulando una defensa.
Los cambios no son sólo a nivel estético sino también en cuanto a dimensiones: la nueva Creta mide 4,30 metros de largo (vs 4,27 m), 1,79 metros de ancho (vs 1,78 m) y 1,62 metros de alto (vs 1,63 m), mientras que la distancia entre ejes se incrementó en 2 centímetros, llegando a 2,61 metros.
Esta renovación también vendría acompañada de nuevas motorizaciones: se habla de un motor naftero 1.0 T-GDI de 120 CV, asociado a una caja manual o automática de 6 marchas, el conocido 1.6 de 130 CV sólo disponible con la transmisión automática y un 2.0 de 166 CV, también con caja automática para la versión tope de gama.
Su lanzamiento en el país vecino está previsto para fines de este mismo año, pero su llegada a Argentina aún es una incógnita ya que la actual recibió un facelift y cambio de procedencia en 2020.
