A pesar del escándalo que representó la detención –y el cinematográfico escape de prisión- de su ex CEO, Carlos Goshn, el Grupo Renault-Nissan continúa trabajando en conjunto. De hecho, la próxima apuesta de la marca del rombo aprovechará la plataforma y la tecnología de la firma nipona: Renault también desarrollará su propio SUV eléctrico, derivado del concept Ariya que Nissan presentó en el Salón de Tokio.
Luego de la presentación del Clio, Captur y Mégane E-Tech, la automotriz francesa continuará ampliando su gama electrificada y esta vez apuntará al Volkswagen ID.4, el SUV eléctrico de la firma alemana que será el segundo integrante de la gama ID. Según anticipan medios de prensa europeos, el Sport Utility del rombo tendrá aspecto de coupé, con un diseño que buscará transmitir deportividad y dinamismo. A modo de referencia, su estilo podría asemejarse al del Arkana, el otro SUV “coupé” de la compañía gala, que no se comercializa en Europa sino que fue pensado para los denominados mercados emergentes.
Vale destacar también que este nuevo modelo será “independiente”, es decir, que no tendrá relación con otros del portfolio de la marca, por lo que se descartaron los rumores iniciales que sostenían que posiblemente la próxima generación del Kadjar pase a ser completamente eléctrico.
Tal como señalamos anteriormente, este SUV compartirá la mecánica con el Nissan Ariya, compuesta por dos motores eléctricos, ubicados uno sobre cada eje y las baterías en el piso del vehículo. Con esta configuración, tendrá tracción integral y una autonomía estimada en alrededor de 500 kilómetros. La plataforma sería justamente la CMF-EV, una variante adaptada para vehículos eléctricos de la ya conocida arquitectura CMF que utiliza por ejemplo, el Renault Clio.
Si bien este nuevo producto se encuentra en pleno proceso de planificación y desarrollo, es posible que tengamos un adelanto, aún como concept, en el Salón de París, que se llevará a cabo entre el 1 y el 11 de octubre en la capital francesa.