
La ofensiva de productos de Audi continúa avanzando a paso firme. Luego del debut de los renovados A5 y Q5, así como de los nuevos eléctricos A6 y Q6 e-tron, la marca de los anillos reveló en Europa la tercera generación del Q3. Con una profunda actualización estética, mejoras tecnológicas y motorizaciones más eficientes, el SUV compacto se renueva por completo para enfrentar a rivales como el BMW X1 y el Mercedes-Benz GLA.
El nuevo Q3 adopta un diseño más sofisticado y moderno. Uno de los elementos más llamativos es el frente dividido: las luces diurnas se ubican en la parte superior, mientras que los faros principales con tecnología Matrix Led permanecen discretamente ocultos tras un cristal oscuro y brillante. Cada faro incorpora nada menos que 25.600 microled, de un grosor menor al de un cabello humano. El remate posterior también es igual de llamativo, ahora incorpora una combinación de luces Oled y una barra Led inferior, que permiten a los usuarios elegir entre seis configuraciones gráficas distintas para personalizar su firma lumínica. En algunos niveles de equipamiento, incluso se podrá optar por un emblema iluminado de los cuatro anillos. Además, en línea con el compromiso de Audi de eliminar los escapes falsos, el nuevo Q3 cuenta con un paragolpes de diseño más limpio que oculta las salidas de escape, reservando configuraciones más agresivas para las versiones deportivas S y RS. Las variantes S Line, por su parte, suman un difusor sin recortes visibles.
Puertas adentro, el diseño mantiene el estilo moderno y funcional de los últimos modelos de la marca, aunque quizás algo impersonal. El conductor dispone de un instrumental digital de 11,9 pulgadas y una pantalla central táctil de 12,8 pulgadas que opera con sistema Android Automotive. Llama la atención que prescinde de la pantalla adicional para el acompañante, vista en otros Audi recientes, lo que genera allí un hueco o una superficie sin aprovechar.
Entre las novedades, se destaca la incorporación de vidrio acústico en las ventanillas delanteras, una primicia en el segmento que mejora notablemente el confort de marcha. Además, se rediseñó la consola central: la palanca de cambios fue reubicada detrás del volante, liberando espacio para portaobjetos, cargador inalámbrico refrigerado y puertos USB. Para lograrlo, Audi desarrolló una palanca izquierda multifunción que agrupa controles de iluminación, limpiaparabrisas y luces de giro.
Mecánicamente, la gama de motorizaciones arranca con un 1.5 TFSI de 150 CV con tecnología mild-hybrid, asociado a una caja automática de doble embrague de siete marchas y tracción delantera. Esta mecánica puede desconectar dos de sus cuatro cilindros para optimizar el consumo. Le sigue un 2.0 TFSI de 264 CV y 400 Nm, ya con tracción integral quattro, mientras que la oferta diésel incluye un 2.0 TDI de 150 CV y 360 Nm, también con tracción delantera. Todos utilizan la misma transmisión automática de 7 velocidades.
La variante más novedosa es la híbrida enchufable, que combina el 1.5 TFSI con un motor eléctrico para entregar 272 CV y 400 Nm de torque. Su batería de 19,7 kWh permite una autonomía 100% eléctrica de hasta 120 kilómetros según el ciclo WLTP, y admite carga rápida de hasta 50 kW, recuperando del 10% al 80% en menos de 30 minutos. Esta versión emplea una caja automática de 6 marchas y sólo estará disponible con tracción dalantera.
Inicialmente, el lanzamiento del nuevo Audi Q3 en Europa está previsto para septiembre, luego arribará a otros mercados en los meses siguientes, por lo que en Argentina habría que esperarlo hacia principios o mediados del año que viene.