Imponente, futurista, sofisticado… son solo algunos de los adjetivos con los que podríamos describir al Skysphere Concept, el primero de una serie de prototipos con lo que Audi mostrará su visión de futuro y lo que es aún más prometedor, cómo cambiará la experiencia de viaje para el conductor y los pasajeros porque, para la firma de Ingolstadt, el auto ya no será un simple vehículo para trasladarse del punto A al punto B, sino toda una plataforma de servicios y funcionalidades.
Comenzando por su diseño, sus proporciones y formas pueden recordar desde a un Batimóvil como a uno de esos señoriales roadsters de antaño y, a decir verdad, la idea no está demasiado lejos, ya que los diseñadores se inspiraron en el Horch 853, una de las compañías que dio origen a Audi. Pero más allá de las características como el largo capot, el remate posterior estirado hacia atrás o las puertas de apertura invertida, se destacan sus trazos rectos y marcados, las formas aerodinámicas y su enorme tamaño: nada menos que 5,23 metros de largo y 1,85 metros de ancho. Pero el Skysphere esconde un truco más: seleccionando el modo Sport, su longitud se acorta hasta los 4,94 metros, reduciendo su distancia entre ejes.
Modificar sus dimensiones tiene un motivo y está relacionado con la experiencia de conducción: en el modo GT, el prototipo se “estira”, priorizando el espacio interior y la comodidad a bordo y es que, con esta función, se esconden el volante y los pedales para operar en modo autónomo de nivel 4. Todo el tablero, de formas tridimensionales y compuesto por numerosas pantallas se enfoca en el entretenimiento de los ocupantes, pudiendo acceder a todo tipo de servicios. Se podrá ver una película, conectarse a las redes sociales o llevar a cabo una reunión de trabajo, todo mientras el vehículo va camino a su destino. Si por el contrario, el conductor quiere justamente disfrutar de las sensaciones de manejo, el modo Sport hace aparecer el volante, la selectora y los pedales, además de acortar la carrocería.
Eligiendo el perfil Sport, el usuario podrá dar rienda suelta a los 632 CV y 750 Nm de torque de su motor eléctrico, alimentado por un paquete de baterías de iones de litio de 80 kWh de capacidad ubicado en el piso del vehículo. Con una sola carga es capaz de recorrer más de 500 kilómetros según el ciclo WLTP o acelerar de 0 a 100 km/h en apenas 4 segundos, a pesar de su peso de 1.800 kilogramos. Todo lo demás también es configurable, desde la dirección –gracias a un sistema eléctrico que permite variar su dureza-, hasta la suspensión, priorizando el confort o el agarre para una conducción deportiva, aprovechando que además su tracción es trasera.
Al respecto, desde Audi destacan la versatilidad que plantea el concept: «Los pasajeros pueden compartir sus experiencias en la ruta a través de las redes sociales, con imágenes del interior y del área circundante. El vehículo también se encarga de las tareas cotidianas que van más allá de la propia conducción. Por ejemplo, puede proporcionar a los pasajeros información sobre su destino y gestiona de manera independiente tanto el estacionamiento como la recarga. Las posibilidades son prácticamente infinitas».
El futuro de la movilidad está llegando para la firma alemana y pronto se le sumarán los concepts Grandsphere y Urbansphere, trilogía que marcará su rumbo en los próximos años.