El TT es uno de los deportivos más icónicos de Audi, una coupé que a lo largo de sus tres generaciones con más o menos cambios, siempre mantuvo su estilo y esencia. Siguiendo con la renovación de su gama, la firma de Ingolstadt presentó una actualización para su versión más deportiva, el RS.
Las modificaciones son apenas perceptibles: en el TT RS 2019 se retocó el diseño del paragolpes frontal –con trazos más rectos y marcados, junto con tomas de aire más grandes-, lo que le otorga una imagen más agresiva. Al igual que en la serie anterior, luce el emblema quattro en la parte inferior de la parrilla –pintada en negro mate-. Técnicamente, este restyling vino acompañado de una mejora en el sistema de regriferación, con radiadores de mayor tamaño. Para quienes quieran personalizar su unidad, se ofrece la posibilidad de variar el tono del spoiler frontal y la carcasa de los espejos.
En la parte trasera, estrena un nuevo alerón fijo –también en negro mate-, así como dos salidas de aire adicionales integradas en el paragolpes y nuevo difusor con doble salida de escape. Asimismo, se suman los colores verde Kyalami, Naranja Pulso y Azul Turbo, exclusivos para esta variante.
Puertas adentro, los cambios se centraron en su dotación tecnológica, con una actualización para el instrumental digital Virtual Cockpit, así como para el sistema multimedia MMI –ahora con tecnología 4G LTE y Wi-Fi a bordo-. Además, se destaca el tapizado y los revestimientos con combinación entre cuero, alcántara y napa.
Mecánicamente, mantiene su motor 2.5 TFSI de 5 cilindros en línea, que desarrolla 400 CV y 480 Nm de torque, acoplado a la caja automática S-Tronic de doble embrague y 7 marchas, así como el sistema de tracción integral quattro. Con este conjunto motriz, acelera de 0 a 100 km/h en 3,7 segundos y alcanza los 250 km/h de velocidad máxima (limitada electrónicamente) o 280 km/h (opcional).
Adicionalmente, cuenta con el Audi Drive Select, un sistema que permite seleccionar y modificar diversos parámetros del motor, la dirección y el pasaje de marchas, así como la suspensión –opcional- Magnetic Ride, con amortiguadores adaptativos.
Su llegada a los concesionarios europeos se dará en los próximos meses, mientras que para su arribo a nuestro país probablemente haya que esperar hasta fin de año.
