Luego de resolver los problemas de software que retrasaron su desarrollo, Porsche encara la etapa final de pruebas de la nueva generación del Macan, que como venimos anticipando, será 100% eléctrica. A medida que transcurren los meses y los ensayos, el SUV va perdiendo camuflaje y ya deja ver gran parte de su diseño, como demuestran estas nuevas fotografías tomadas en Alemania.
Si bien la unidad aún contaba con algo de camuflaje, ahora ya es posible ver sus principales rasgos: el nuevo Macan plantea una evolución respecto al modelo actual, por lo que no habrá que esperar modificaciones muy profundas sino un estilo algo continuista, pero a la vez con algunas novedades. El principal cambio se observa en el frente, con faros de formato similar a los del Taycan en la parte superior, pero con las luces principales ubicadas a la altura de la toma de aire central, por lo que al parecer el SUV también sucumbirá al conocido recurso de dividir el frente en dos sectores.
De perfil, el formato de las ventanillas y parte de su silueta es bastante similar al actual Macan, aunque el remate posterior es mucho más pronunciado, al estilo del Cayenne Coupé. En este sector también se destacan los faros de Led que se extienden a lo ancho del portón y el difusor trasero sin salidas de escape, lo que confirma que estamos ante una versión eléctrica. Tal como informamos en un artículo anterior, para mitigar la espera, hace unos meses atrás la propia marca comenzó a develar algunos datos del futuro Macan: la versión más potente tendrá más de 610 CV y 1.000 Nm de torque, con una configuración de dos motores y tracción integral. También habrá variantes con un solo propulsor, ubicado en el eje trasero.
La nueva generación estará desarrollada sobre la plataforma modular PPE –la misma del Taycan y del Audi RS e-tron GT- y ya está siendo testeada por los ingenieros de Porsche, aunque con unidades muy camufladas o mulas de prueba. Estéticamente, se espera que combine rasgos del Taycan –especialmente en el sector frontal- junto con la típica silueta de los SUV’s de la marca. Por el momento no hay muchos datos sobre sus características técnicas, pero podemos tomar como referencia a la berlina: contaría con una autonomía cercana a los 500 kilómetros y su arquitectura eléctrica de 800 voltios permitirá el uso de supercargadores con los que se podrá reabastecerse en un 80% en sólo 15 minutos.
Por otra parte, también contará con diferencial autoblocante en el eje trasero y su ángulo de dirección mejorará en un 15%, facilitando las maniobras de estacionamiento o a baja velocidad. En ello también colaborará el sistema de dirección en las ruedas traseras, que funcionará a velocidades por debajo de los 80 km/h.
Sabido es que los SUV’s se convirtieron en un pilar fundamental del éxito de Porsche y como señalamos en otras oportunidades, a final de cuentas son los que permiten que la compañía pueda seguir invirtiendo y desarrollando deportivos tradicionales como el 911. De ellos, el Macan es el más vendido, por lo que si bien esta jugada puede parecer arriesgada, lo cierto es que demuestra el compromiso de la marca con su estrategia de electrificación. Con continuas actualizaciones –la última de las cuales arribó recientemente a nuestro país- esta generación fue lanzada en 2014, por lo que cerrará su ciclo de vida comercial cumpliendo diez años en el mercado.
Más allá de que el 2024 será el año en el que llegará la nueva generación 100% eléctrica, la segunda generación del Macan –que será producida exclusivamente en la planta alemana de Leipzig- convivirá durante un tiempo con el modelo actual, complementándose entre sí.
