Poseer la primera o la última unidad fabricada suele ser uno de los aspectos más valorados y codiciados por los coleccionistas de autos clásicos, que en esos casos no tienen ningún problema en desembolsar miles o millones de dólares con tal de poder lucir esta pieza en su garage.
Las expectativas –y las sumas- aumentan considerablemente si se trata de un deportivo y más si lleva el emblema de Porsche o Ferrari. En este caso, era aún más especial: se subastaba el último 911 (de la generación 993) turbo fabricado por el equipo de Project Gold, formado por ingenieros y técnicos de Porsche Classic y Porsche Exclusive Manufaktur.
No es un 993 turbo más (de por sí bastante exclusivos), sino un resto-mod realizado por la propia firma de Stuttgart que combina la carrocería del 993 con varios componentes y características inspiradas en el 911 Turbo S Exclusive Series actual. Detrás de su llamativo color dorado con llantas pintadas en un tono negro mate, esconde un motor bóxer de 3.6 litros, biturbo, que desarrolla 456 CV fabricado desde cero.
Tan sólo 10 minutos y 37 ofertas fueron suficientes para que este 993 Turbo marque un récord y se convierta en el nueveonce más caro de la historia: pagaron por él, nada menos que U$S 3.125.000 en la subasta por el 70º aniversario de Porsche, realizado por la reconocida firma RM Sotheby’s durante el sábado en el Porsche Center de Atlanta (Estados Unidos).
Lo mejor, es que parte de esa cifra (los U$S 2.950.000 de ingreso neto que tuvo la marca alemana) serán destinados a la Fundación Ferry Porsche, una entidad sin fines de lucro que fue creada el año pasado y centra sus actividades benéficas en Stuttgart, Leipzig y otras ciudades donde la marca tiene representación, apoyando la educación, investigación, deportes, cultura y asuntos sociales orientados a los jóvenes.
En total, durante el evento fueron subastados 51 vehículos, de los cuales el más esperado era este 993 que arrancó con un precio base módico en comparación con lo que se terminó pagando: sólo U$S 175.000. Según trascendió extraoficialmente, su afortunado nuevo dueño es un coleccionista europeo.