Si el ID.3 es considerado el Golf de los eléctricos y las versiones GTX son semejantes a las icónicas GTI, podríamos decir que Volkswagen está trabajando en el equivalente al Golf GTI eléctrico: Ralf Brandstätter, CEO de la firma de Wolfsburg publicó en su cuenta de Linkedin una serie de fotografías de un prototipo denominado ID.X que adelanta una futura versión deportiva del ID.3.
Hasta el momento, la marca sólo confirmó los ID.4 y ID.5 GTX, pero sería lógico que el hatchback mediano también cuente con una variante de este tipo y es lo que el ID.X intenta reflejar. Estéticamente, su carrocería fue pintada de color gris grafito en un tono mate a los que agrega, en contraste, llamativos detalles en amarillo fluorescente en los paragolpes, faros y el techo. Mención aparte para las enormes y vistosas llantas de aleación de unas 18 pulgadas como elemento más distintivo y que le aportan el toque más sport a esta unidad.
Puertas adentro, el tono amarillo fluorescente vuelve a hacerse presente en varios apliques que bordean las salidas de aire, la parte inferior del volante y las alfombras, además de incorporar butacas deportivas tapizadas en alcántara.
Más allá de las pequeñas modificaciones o particularidades de su diseño, lo más interesante está en su mecánica. Partiendo de la misma base de todas las versiones del ID.3, la plataforma modular eléctrica MEB y su configuración de motor delantero y tracción trasera, los ingenieros de Volkswagen elevaron su potencia pasando de los 306 a los 333 CV, a la vez que lograron reducir 200 kilos de peso. De esta manera, el prototipo puede acelerar de 0 a 100 km/h en apenas 5,3 segundos. En cuanto a su alimentación, se mantiene la batería de iones de litio de 77 kWh de capacidad, aunque no fue informada su autonomía. Con estas cifras, el ID.X supera considerablemente en aceleración al Golf GTI Clubsport, que llega a los 100 km/h desde cero en 5,7 segundos.
¿Será producido en serie? Por ahora no está definido, sí está claro que la marca viene trabajando en este proyecto y más allá de una simple cuestión de imagen y de demostración del potencial de su plataforma, difícilmente se conforme sólo con exhibirlo, por lo que podría sumarse a la gama a corto o mediano plazo. Por el momento, Brandstätter sólo se limitó a afirmar: “Yo siempre dije que nuestra plataforma MEB es versátil y el ID.X traduce muy bien el concepto. Incluso si el ID.X no llega a ser un vehículo para entrar en producción, llevaremos muchas de sus ideas”.