Finalmente llegó el día en que BMW decidió develar por completo al nuevo Serie 8, que será su nuevo buque insignia y representa el regreso de esta denominación luego de la recordada e icónica primera generación. Su presentación, tal como estaba previsto, se dio en simultáneo con la versión de competición, que el sábado participará de las míticas 24 horas de Le Mans.
Volviendo a la versión de calle, su diseño está claramente inspirado en el concept presentado hace un año atrás, con una figura más estilizada que las coupés tradicionales de BMW, que combina elegancia y deportividad. Líneas marcadas, trazos afilados por doquier hacen que el nuevo producto de la firma de Munich luzca imponente, pero a la vez dinámico… una combinación que como señalamos en el título, fusiona la elegancia con la deportividad.
En el interior del nuevo BMW Serie 8, el nivel de refinamiento, lujo y detalles es inclusive superior al del Serie 7, con revestimientos de cuero bi-tono, apliques en aluminio y hasta la selectora de cristal. El toque de sofisticación lo aportan el nuevo instrumental completamente digital de la marca (BMW Live Cockpit Proffesional), con un display de 12,3” configurable por el conductor, y una enorme pantalla táctil de 10,25” del sistema multimedia, con controles por voz y por gestos. Mención aparte para el sistema de conducción semi-autónoma, que puede acelerar, frenar o tomar curvas en la autopista, aunque requiere que el conductor conserve las manos en el volante a modo de precaución.
Mecánicamente, la versión M850i –la primera en comercializarse-, está impulsada por un V8 twin turbo que desarrolla 530 CV y 750 Nm de torque, acoplado a una transmisión automática de 8 velocidades y un sistema de tracción integral inteligente xDrive, con con diferencial trasero activo, eje trasero direccional –que permite un mejor comportamiento en curvas y reduce el radio de giro en maniobras de estacionamiento- y suspensión con barras estabilizadores activas.
Para sorpresa de muchos, el Serie 8 también contará con una versión diésel, la M840d xDrive contrariamente a lo que sucede con otras marcas que están discontinuando su oferta de vehículos impulsados por este combustible. En este caso, un 6 cilindros en línea, de 3.0 litros, que entrega 320 CV y 680 Nm de par, acoplado a una caja automática de 8 marchas y tracción integral xDrive, con un consumo homologado de 5,9l/100 km.
Su comercialización en Europa comenzará en los próximos meses, mientras que su llegada a nuestro país aún es una incógnita.
