Hace unos meses atrás, el Polo estrenó la especificación Model Year 2022 en nuestro mercado, una sutil actualización con algo más de tecnología pero sin cambios estéticos ni mecánicos a la espera de una renovación más profunda que fue presentada en Europa el año pasado y que a la región arribará recién en 2023. Más allá de este retraso con respecto al Viejo Continente debido a que aquí el hatchback fue lanzado también de manera posterior a aquel mercado, Volkswagen ya comenzó a realizar los habituales test de rodaje del facelift.
Fotografiado y publicado en el Instagram AutoGam Consultoría, la imagen muestra una unidad de pruebas con bastante camuflaje en el sector frontal, aunque al observarlo más en detalle se pueden visualizar gran parte de los cambios. El Polo brasileño seguirá los mismos lineamientos de su par europeo: incorporará nuevos faros con proyectores de Led –según la versión- y una nueva firma luminosa. Su formato cambia levemente, invadiendo parte del paragolpes. La parrilla será más fina y en el modelo del Viejo Continente, cuenta con un aplique de color carrocería en su parte superior y la continuación de las DRL que se extienden hasta el logo de la marca. No está confirmado si este detalle se mantendrá en la versión regional. El paragolpes posee una toma de aire más ancha y dos más en los extremos que sirven como marco para las luces antiniebla. Por último, el capot luce nervaduras más marcadas. Con esta actualización, se buscó darle un aire de familia y acercarlo a la imagen del Golf VIII.
De perfil, la única modificación será el diseño de las llantas de aleación –diferentes para cada versión-, mientras que en la parte trasera, según señalan medios de prensa brasileños, se mantendrá sin cambios. En este sector se diferenciará del modelo europeo ya que el hatchback producido en España sí incorporó nuevos faros y paragolpes.
Puertas adentro, parte de las modificaciones ya las incluye el MY2022, como el nuevo volante de la marca junto con el sistema multimedia VW Play y los nuevos comandos del climatizador, ahora operable a través de un panel táctil en lugar de las más intuitivas perillas y botones. De acuerdo a nuestros colegas, debería sumar plásticos y revestimientos soft touch, algo que siempre le reclamamos al Polo/Virtus. En el Viejo Continente agregó el paquete de asistencias IQ.Drive, con control de velocidad crucero adaptativo y alerta de cambio de carril involuntario, que permite una conducción semi-autónoma hasta los 210 km/h. Si bien probablemente en nuestra región estos sistemas no sean tan avanzados, es esperable que sume algunas asistencias a la conducción.
Mecánicamente, la gama pasaría a estar compuesta únicamente por motores 1.0 MPI (exclusivo para Brasil) y los TSI 1.0 y 1.4, aunque cabe aclarar que en el país vecino, el hatchback nunca se comercializó con el 1.6 MSI con el que llega a Argentina. Entonces, como novedad para Argentina, pasaría a ofrecer el 1.0 TSI –posiblemente en su configuración de 116 CV- con la caja automática Tiptronic de 6 velocidades. Por supuesto, el 1.4 TSI de 150 CV quedará reservado para la versión deportiva GTS.
La presentación del Polo MY2023 se daría a principios o mediados del año que viene y vendrá acompañado también del Polo Track, que se convertirá en el modelo de entrada de la marca alemana.
Lo que debería incorporar urgente son los airbags de cortina (los tienen sus rivales, 208, Yaris, Onix, Versa). Las ADAS podrían ser para los GTS y Highline 1.0 TSI (que son caros).
Y del soft touch mejor olvidarse, ya que la TAOS no lo tiene.
Saludos
La lógica indica que el motor 1.0 tsi sea la versión 170 de 101 cv y no la 200 de 116 cv que es mas cara, si no el nivus contari con una versión de menor poder siendo un vehiculo mas costoso.
era hora que le cambien las motorizaciones para la argentina . . para lo retractores del 1.6 en brasil como dice la not nunca se comercializo . debe ser por cuestion de las exigencias del mercado