El año pasado, Scania presentó en Argentina su nueva generación de buses, con una muy amplia gama que abarca desde chasis para urbanos, hasta media y larga distancia con opciones a GNC en cada segmento. También se destacan por su mejora a nivel tecnológico, en seguridad y sobre todo en eficiencia. Si bien la marca sueca siempre tuvo un gran reconocimiento en larga distancia, en su regreso a los urbanos está ganando cada vez más terreno gracias a sus ventajas operativas.
El bajo consumo de combustible y su versatilidad para trayectos en ciudad y en ruta fueron aspectos clave para que el Grupo Dota definiera la adquisición de nuevas unidades a favor de la firma escandinava. Es así que Scania concretó recientemente la entrega de 26 buses para la línea 21, que une el sur con el norte de Buenos Aires, recorriendo más de 500 kilómetros diarios y llegando hasta Tigre o General Pacheco, según el ramal.
Ya teníamos con Scania un vínculo comercial, luego de haber adquirido hace más de diez años 11 unidades articuladas que aún se encuentran en circulación. Estamos muy contentos con los servicios de mantenimiento, además de que los vehículos son muy confiables y permiten un bajo consumo de combustible”, destacó Pablo Crudo, encargado de la planta Dota.
Además de la entrega de los ómnibus, Scania puso a disposición de Dota un asesor técnico de buses que se encarga de asistir junto al cliente en lo referido a la parte técnica para garantizar siempre su funcionamiento. El asesoramiento abarca desde un diagnóstico hasta cómo colocar un repuesto. “Buscamos continuar fortaleciendo vínculos estrechos, como en este caso con Grupo Dota y como hemos trabajado codo a codo con Todo Bus, responsable del carrozado. En estos servicios es clave la optimización del tiempo operativo de las unidades, por lo cual se aprovechan los turnos nocturnos para las tareas de mantenimiento, sin que se perjudique al pasajero”, explicó Alejandro Ariza, Gerente de Buses Urbanos para Scania Argentina.
Los nuevos colectivos carrozados por Todo Bus, utilizan el chasis K250 4×2, impulsado por un motor de 6 cilindros en línea y 9 litros, que entrega 250 CV y se asocia a una caja automática ZF de 6 marchas, que siempre dio muy buenos resultados en este tipo de aplicaciones. La principal ventaja radica en el bajo consumo de combustible, sobre todo en operaciones suburbanas al subir a una autopista, lo que hace que el vehículo brinde su mejor performance obteniendo el menor consumo y la mayor vida útil del motor por trabajar a un bajo régimen de rpm.