Llegó el momento de la esperada renovación del DS 7 Crossback, la nave insignia entre los SUV’s de la marca francesa, incorporando aún más mejoras de las esperadas. En primer lugar y por más de que se trate de un simple detalle de color, abandona justamente la denominación Crossback para llamarse simplemente DS 7, tal como lo anticipamos hace algunas semanas atrás junto con varios medios de prensa europeos.
Más allá de tratarse de una actualización de media vida, la evolución es realmente completa: diseño, tecnología, performance y rendimiento. A nivel estético, las modificaciones son algo sutiles pero alcanzan a reconocerse en un primer vistazo. En el sector frontal, los faros son más finos e incorporan la tecnología DS Pixel Led Vision 3.0 junto con las luces diurnas DS Light Veil, con una firma luminosa de cinco barras verticales, quizás un tanto inspiradas en los colmillos de Led de Peugeot, pero con su propia impronta y que seguramente será el sello de identidad de los próximos productos de DS. La parrilla es más ancha y recta y estrena un nuevo entramado diamantado. De perfil, las únicas modificaciones son las nuevas llantas de aleación –de 19 a 21 pulgadas con terminación bitono diamantadas-, mientras que en la parte trasera los faros estrenan una máscara oscurecida y un aplique que se extiende a lo ancho del portón con la inscripción DS Automobiles en lugar de “Crossback” como en la serie anterior.
Puertas adentro también hay cambios sutiles: cuenta con instrumental 100% digital con display de 12” y una nueva pantalla de 12” para el sistema multimedia DS Iris System, con más funciones y una interfaz más rápida. Asimismo, sumó nuevos colores para los revestimientos y diferentes opciones de personalización, incluyendo un sistema de iluminación ambiental. Por supuesto, mantiene las numerosas asistencias a la conducción como el control de velocidad crucero adaptativo, detector de fatiga, cámara de visión nocturna y el sistema de amortiguación activa DS Active Scan Suspension.
Donde hay más novedades de las esperadas es en su mecánica: a los motores nafteros PureTech de 130, 215 y 225 CV junto al diésel BlueHDi de 130 CV, el DS 7 priorizará ahora a las opciones electrificadas, ofreciendo un total de tres opciones híbridas enchufables.
La gama E-Tense estará compuesta por la versión 225 que combina el motor naftero PureTech de 180 CV con un motor eléctrico de 110 CV con el que desarrolla en conjunto 225 CV –de ahí su nombre-, asociados a la caja automática de 8 velocidades, con tracción delantera. El siguiente escalón es la variante E-Tense 4×4 300, que incrementa la potencia del propulsor naftero a 200 CV y agrega un segundo motor eléctrico de 112 CV que actúa sobre el eje trasero y entrega en conjunto 300 CV. Por último, la tercera opción es la E-Tense 4×4 360, que con una calibración desarrollada por DS Performance sube la potencia total a 360 CV. El DS 7 recibió además una nueva batería de iones de litio de 14,2 kWh que le permite lograr una autonomía en modo eléctrico de hasta 65 kilómetros según el ciclo WLTP. Utilizando un cargador de 7,4 kW, puede recargarse en unas dos horas.
Como suele ser habitual en estos casos, para celebrar la renovación, DS creó una edición de lanzamiento denominada La Première, basada en la variante E-Tense 4×4 360, con el nivel de terminaciones Opera. Como particularidades, agrega varios detalles en negro y ofrece una paleta de colores compuesta por los tonos Gris Laqueado, Azul Zafiro, Blanco Nacarado, Negro Perla Nera, Gris Platino y Cristal Perlado. Las primeras entregas se concretarán en septiembre en el Viejo Continente, mientras que para su llegada a nuestro país estimamos que habrá que esperar hasta el año que viene.
Los falsos escapes son muy exagerados.. por lo demás a mi parecer se ve muy bien