Como parte de su plan de reestructuración a nivel mundial y luego del anuncio de que cerrará la planta de Sao Bernardo do Campo en Brasil –donde se fabrican el Fiesta y toda la gama de camiones de la marca, desde el Cargo hasta el F-4000-, Ford confirmó que también finalizará la producción en tres plantas de Rusia, una de las cuales era la encargada de producir la EcoSport para aquel mercado.
En el país gobernado por Vladimir Putin, la marca del óvalo opera desde 2011 como parte de un joint venture con la compañía Sollers –denominado justamente Ford Sollers-. La firma norteamericana llegó a Rusia en 2002 y se convirtió en la primera compañía internacional en contar con una línea de montaje en el país.
A partir de junio, la marca cerrará sus operaciones en la planta de San Petesburgo, donde se fabrica el Mondeo y Focus, así como también en el complejo industrial de Tatarstan que produce la EcoSport y en la factoría de Elabuga, encargada de la fabricación de motores para la Kuga y Explorer. Allí, sólo se mantendrá en producción la Transit, a cargo de Sollers, que asumirá el 51% de participación en la planta.
De esta manera, la firma estadounidense sigue adelante con su estrategia que tiene como objetivo un ajuste de U$S 11.000 millones para aumentar la rentabilidad de sus operaciones internaciones, que representan sólo el 3% de las ganancias de la compañía.
Asimismo, en Europa está previsto el cierre de una planta de transmisiones en Francia, así como la discontinuación de la gama de monovolúmenes de la marca (C-Max, Grand C-Max, S-Max y Galaxy) para enfocarse en SUV’s y crossovers al igual que en el mercado norteamericano. Inclusive, también se habla del posible cierre de la planta de Ford en Alemania, donde ya se inició una serie de negociaciones con los sindicatos locales.
Reestructuración cerrando 10 fábricas en el mundo…, o mejor dicho, sobrecargar las pocas que quedan, así ganar más…, pero también va tener menos ventas al retirarse de mercados.
Tremenda reestructuración