A fines de septiembre ya señalábamos que el Fiat Fastback venía logrando un nivel de ventas en Brasil que superaba con creces la demanda estimada por la marca –que preveía comercializar entre 2.500 y 3.000 unidades-. Un mes después, aquellos 5.400 pedidos prácticamente se duplicaron y el SUV Coupé acumula unas 10.000 reservas. Como era de esperarse, todavía no se entregó el total de unidades, pero se trata de pedidos en firme.
Al respecto, Herlander Zola, Vicepresidente Senior de Fiat para América del Sur, destacó: “Estamos conquistando cada vez más el mercado de SUV’s gracias al excelente desempeño del Fastback, que ya aparece frente a competidores consolidados en el segmento. Todo esto se da por los atributos del producto, como su óptimo desempeño, diseño único y un amplio espacio interior, pero también por el gran trabajo que viene siendo realizado por nuestra red de concesionarios”.
Desarrollado sobre la plataforma modular MLA –la misma del Pulse-, cuenta con mejoras estructurales y más tecnología para permitir la incorporación de asistencias a la conducción-.
Estéticamente, el Fastback comparte el sector frontal con el Pulse Abarth, replicando sus faros de Led, el formato de la parrilla –con un entramado diferente, en negro brillante- y el paragolpes, al que agrega las luces antiniebla ubicadas en la parte inferior, casi ocultas. Sin dudas, lo más novedoso es su silueta, con trazos muy marcados y líneas que realzan su porte, el remate posterior se asemeja al del prototipo, aunque también notamos un innegable aire al BMW X6, que inició esta tendencia entre los SUV’s.
Puertas adentro, el tablero está basado en el Pulse, al que agrega algunos detalles para darle un aire de mayor refinamiento. El diseño es prácticamente idéntico al B-SUV: salidas de aire, instrumental, volante, sistema multimedia y comandos del climatizador. Las diferencias comienzan a aparecer en la parte inferior de la consola central, que agrega los botones del freno de mano eléctrico, la función Auto Hold y el encendido/apagado de la función Stop&Start.
Mecánicamente, se ofrecen dos alternativas impulsadas por los nuevos motores Firefly 1.0 y 1.3 turbo. En Brasil, la gama estará compuesta por dos niveles de equipamiento –Audace e Impetus-, más una serie especial de lanzamiento denominada Limited Edition by Abarth. La variante de entrada y la intermedia equipan el propulsor T200 (1.0 turbo) de 125/130 CV (a nafta/etanol) y 200 Nm de par, asociado a la caja automática CVT con 7 marchas simuladas y la tope de gama emplea el T270 (1.3 turbo) de 180/185 CV (a nafta/etanol), asociado en este caso a la caja automática con convertidor de par de 6 velocidades. Todos cuentan con tracción delantera.
Según indica la marca, alrededor de un 50% de las reservas corresponden a la Limited Edition by Abarth, la más cara del portfolio. Para su llegada a los concesionarios de nuestro país aún habrá que aguardar algunos meses más, ya que Fiat confirmó su lanzamiento para principios de 2023.
Pá gusto lo colore, dijo mi abuelita
Estoy esperando que llegue a Argentina para adquirir uno. Con uno me conformo.
No me gusta. No la veo lograda en absoluto. La parte delantera no está «conectada» con la trasera y se nota mucho. Es un híbrido con un diseño raro. No es un auto que compraría.
Quedó un ensamble que no me termina de cerrar el cronos tiene líneas fluidas pero esto tipo clio o 207 se despega mucho del diseño pero bueno es tendencia