
Hyundai saca a relucir toda su capacidad de desarrollo y de la mano de la división N crearon la versión más deportiva del IONIQ 5, un vehículo capaz de lograr cifras que igualan o superan a deportivos de muchísima trayectoria y una puesta a punto llevada a cabo en el mítico circuito de Nürburgring. Las primeras fotografías se habían filtrado ayer pero rápidamente la marca decidió publicar las imágenes oficiales en el marco del Festival de la Velocidad de Goodwood, donde fue presentado.
Comenzando por lo más interesante, su mecánica está compuesta por dos motores eléctricos que entregan en conjunto 600 CV y 738 Nm de par, pero que pueden llegar hasta los 650 CV y 768 Nm durante 10 segundos mediante la función N Grin Boost, superando holgadamente a su “primo” de plataforma E-GMP, el Kia EV6 GT que llega a 585 CV. Con semejante potencia y el aporte del N Launch Control, puede acelerar de 0 a 100 km/h en apenas 3,4 segundos y alcanzar una velocidad máxima de 260 km/h (limitada electrónicamente), nada mal para un eléctrico, considerando que se suele reducir considerablemente la velocidad para evitar un consumo excesivo de las baterías.
Adicionalmente, el IONIQ 5 N posee un selector de modos de conducción que permitirá elegir entre tres modos y dos funciones extra para la batería: en el modo Sprint, con el que funciona por defecto, se encarga de ofrecer las máximas prestaciones; el Endurance maximiza la autonomía limitando los picos de energía repentinos que ralentizan la acumulación de temperatura y aumentan la resistencia, los dos modos del sistema N Race. El sistema N de pre-acondicionamiento de la batería también cuenta con dos modos, Drag y Track. En el primero, la temperatura óptima se establece para el uso inmediato de la máxima potencia, mientras que el segundo la rebaja para aumentar el número de vueltas en circuito.
Además de estas mejoras en su mecánica, también tendrá una importante revisión en su sistema de frenos, con discos de 400 mm y una función de regeneración que aporta una fuerza de desaceleración máxima de 0,6 G, la más elevada en un vehículo de serie.
En cuanto a sus baterías, la marca indicó que la versión N posee una completamente nueva, de 84 kWh de capacidad. Aunque la compañía no informó su autonomía, se cree que le permitiría llegar hasta los 350 kilómetros con una sola carga. No es mucho, pero hay que tener en cuenta la potencia y las prestaciones que desarrolla.
Todas estas modificaciones están acompañadas de una estética mucho más agresiva y aerodinámica, que incluso hace crecer algunos milímetros las dimensiones del hatchback. En el frente se destaca el paragolpes con enormes tomas de aire y trazos más angulosos y marcados, mientras que de perfil posee pasarruedas ensanchados, zócalos más prominentes y un difusor en la parte trasera junto con un alerón más grande rematando el portón.
Puertas adentro, la ambientación deportiva está dada por las butacas con mayor agarre lateral, los revestimientos en cuero/alcántara y un sistema que simula el sonido de un motor y el pasaje de marchas, llegando a unas “ficticias” 8.000 rpm. Sí, más allá de su destacada performance, no hay manera que un eléctrico tenga el mismo y emocionante sonido de un motor de combustión.
Al respecto, Jaehoon Chang, Presidente y Director Ejecutivo de Hyundai, afirmó: “La combinación ganadora de conocimiento tecnológico y experiencia en deportes de motor de la marca N está superando los límites de rendimiento del vehículo. Los desarrollos clave en torno a este vehículo fortalecerán aún más la competitividad de todos los modelos de Hyundai en el futuro”. Su llegada a los concesionarios europeos se concretará en los próximos meses.