Cada vez más se buscan alternativas de combustible siendo los propulsados por célula de combustible los que merece la pena investigarse.
Es el caso de Hyundai con su modelo Tucson FCEV (Fuel Cell Electric Vehicle o Vehículo de Célula de Combustible) que utiliza hidrógeno a presión y que tuvimos la oportunidad de verlo en el Salón internacional del Automóvil de San Pablo.
La Hyundai Tucson de hidrógeno es propulsada por la energía eléctrica generada por un sistema de conversión Fuel Cell, o célula de combustible, que tiene como principio la reacción electroquímica reversible denominada hidrólisis.
En el caso de la Tucson utiliza hidrógeno a presión y hace reaccionar el hidrógeno con el oxigeno obteniendo agua, que se evapora en el ambiente y energía electrica, resultando un vehículo no contaminante.
Esta Tucson posee tracción delantera con tres posiciones de la palancas de cambio D hacia delante N Neutro R Retroceso.
A simple vista se observa un radiador de mayor tamaño, sobre el vano motor se encuentra la célula de combustible, el motor eléctrico de 80 kW equivalente a 109 CV y la unidad de control.
En la parte trasera de la carroceria se encuentran las baterías de litio y los depósitos de hidrógeno, uno de 74 litros y dos de 39 dando una capacidad total de 152 litros, construidos con fibra de carbono y vidrioCon estos tanques le permiten realizar 300 kilómetros a 120 km/hora, pudiéndo alcanzar una velocidad máxima de 150 km/h, acelerando de 0 a 100 km/h en 18 segundos.