En nuestra región es bastante común que convivan durante algún tiempo dos generaciones de un mismo producto. Pasó con Fiat, Peugeot y Nissan por mencionar ejemplos recientes, pero ahora también ocurrirá en América del Norte con el Kicks. Tal como en Sudamérica, el B-SUV se mantendrá en el mercado posicionándose como el modelo de entrada de gama y con una nueva denominación: Kicks Play.
La estrategia de que las dos generaciones convivan suena lógica ya que el Kicks actual mantiene un excelente nivel de ventas y además, la marca necesita un producto accesible y de gran volumen. Además, es algo que ya hizo en el pasado y es allí donde entra en juego otro rumor que surgió en los últimos días: al igual que con el anterior Versa que pasó a llamarse V-Drive tras el arribo de la nueva generación, lo mismo sucederá con el B-SUV.
Si bien en un momento se dijo que la vieja generación pasaría a llamarse K-Drive replicando la estrategia del Versa y V-Drive, finalmente se confirmó que su nombre será Kicks Play, denominación que utilizará en el mercado norteamericano y también en nuestra región. Cuando esto suceda y la nueva generación del B-SUV comience a ser producida y comercializada, el modelo anterior tendrá una pequeña “actualización”, simplificando su diseño para reducir los costos: los faros serán levemente rediseñados, al igual que la parrilla y el paragolpes. También sucederá lo mismo en el interior, perdiendo detalles de terminación y seguramente, reduciendo su nivel de equipamiento.
Mecánicamente, el Kicks Play sí mantendrá el conocido motor naftero 1.6 de 120 CV, acoplado a una caja manual de 5 marchas y posiblemente también conserve una opción con caja automática X-Tronic CVT. Con estos leves retoques y reposicionamiento dentro del portfolio, Nissan apuntaría a poder comercializarlo unos cuatro o cinco años más.
De esta manera, la firma nipona se asegura contar con un producto más accesible y de mayor volumen, aprovechando la demanda que aún tiene la primera generación y que se mantiene muy vigente en el mercado.