Es muy habitual para las automotrices celebrar los hitos productivos, especialmente cuando se llegan a las 100 mil, 500 mil o un millón de unidades, pero esta vez, aunque la cifra es menor (20 mil unidades), debido a que sólo se tuvo en cuenta su exportación, es igual de importante, ya que refleja la rápida puesta en funcionamiento de la nueva planta de Nissan en Resende.
Ubicada en el estado de Río de Janeiro, esta fábrica fue inaugurada en marzo del año pasado para producir el March y Versa, que ya llegan a nuestro país provenientes de allí, y también el Kicks, que en los próximos meses cambiará su origen mexicano por el brasileño, lo que le permitirá a la marca japonesa poder contar con un mayor volumen de unidades.
Recientemente, para aumentar el volumen de exportación, la planta incorporó un segundo turno de producción, generando 600 puestos de empleo directos. Según datos de la firma nipona, desde Resende se abastecen ocho países de la región, entre los que se destaca Argentina, que recibe el 44% del total.
“Cuando iniciamos el proyecto de exportaciones del Complejo Industrial de Resende, sabíamos que la demanda en América Latina estaba en crecimiento. Nos preparamos para eso y queremos transformar a Resende en un polo de exportación mucho más poderoso. Nuestra fábrica tiene una función estratégica en el desarrollo de Nissan en el mercado regional”, afirmó al respecto Sérgio Casillas, Director de Operaciones de la planta.
